ᴜɴᴀ ɢᴜᴇʀʀᴀ ᴅᴇʟ ᴘᴀꜱᴀᴅᴏ

Capítulo 3: Vidas Pasadas

Narra ¿?:

Nuestra r**a se tuvo que esconder para poder sobrevivir, ya que los humanos han desarrollado nueva tecnología, nuevas armas que son capaces de dañarnos, pero no para que nos puedan eliminar, además del tratado que firmamos anteriormente con los humanos que estuvieron en esa guerra.

Hemos estado escondiendo nos, aunque antes éramos libres ahora casi no lo somos, es mejor que los ellos piensen que son los únicos en este planeta, fue por el bien común, además no permitiría que mi r**a se extinga, yo como su Alpha debo ver por ellos, sin embargo, debo admitir que también hay seres en que no están de acuerdo con esta regla de mantenernos ocultos, así que debo tomar medidas.

-Señor – dijo entrando una joven con su vestimenta formal – ya es hora de su junta, lo están esperando

-Retírate – sin verla, esta misma sale por una puerta que queda frente a él.

Vemos que este ser se levanta de su silla de oficina de cuero n***o, se levanta para mirar la ventana que ocupa la mayoría de su oficina…

-Abzu – dijo una chica entrando por otra puerta – estamos esperando ¿Qué estás haciendo?

-Solo pensé en cómo son las cosas tan distintas – dijo Abzu mientras aún miraba por la ventana el atardecer del día – los humanos han hecho muchas cosas, pero eso no les quita sus ambiciones.

-No todos son así – dijo aún la chica.

-… andando.

Cuando va hacia la chica mira su oficina elegante, con sofás cómodos, y su escritorio, también hay pinturas de distintos pasajes, frunce las cejas un poco, camina hacia la puerta abierta. Pasa por un mini pasillo, pero mientras avanza su cabello antes corto se alarga, además de que antes n***o se vuelve rubio, sus ojos azules ahora son rojos. Al llegar al final del pasillo, se puede observar una mesa rectangular transparente, con sillas de oficina negras, varias están ocupadas.

-Mira ¿Quién decidió aparecer, mi querida Zaleska? – dijo un chico de cabello n***o su peinado es de pelos parados con un percing en el labio, sus ojos verdes, piel pálida, vestido de forma pandillero (sus pantalones negros rotos de las rodillas, camisa blanca con un chaleco n***o de mezclilla, y unos converse negros).

-Mi querido Anubis no lo entiendes – dijo una chica de cabello lila, sus ojos rojos, vestida con un vestido n***o pero corto y muy pegado con una botas de aguja largas que les llegan a las rodillas – él es el jefe puede hacer lo que quiera.

-¿Dónde está Zero? – dijo Abzu sentándose en la principal silla – sigue …

-Así es – dijo la anterior chica que le hablo, ella es cabello n***o con mechas rubias, lo tiene atado en una coleta alta, ya que su cabello era muy largo – se acerca el día … ese día donde la perdió…

-Lo sabemos Akali… Ese día se perdió demasiado – dijo un chico al lado casi de llega ya que se hacía un silla y después seguía el, con su cabello n***o sujetado por una coleta baja, teniendo los ojos cerrados, pero los abre un poco y se pueden ver que son color miel – pero logramos detener ese a catástrofe.

-Lo sé Shun – dijo Akali con tristeza

-Al menos descubrimos a la traidora, esa perra Sa… - siendo interrumpido Anubis.

-Aquí no se menciona su nombre Anubis – dijo Abzu frío – lo sabes perfectamente, no debes de mencionarla.

-Ahí querido siempre tan inoportuno – dijo Zaleska sonriendo coqueta – Abzu, sabes cómo es de … como se diría.

-Tonto – dijo uno entrando con uniforme de militar, cabello rojo con mechas negras y ojos rojos – mi Alpha, siento la tardanza estaba atrapando a unos traidores.

-Hmp – dijo Abzu mirándolo.

-Toma asiento Hayate la reunión dará inicio – dijo Akali sabiamente.

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Narra Akane:

Qué es esto, porque sueño esto, es una pesadilla tengo que despertar a la de ya… pero mientras me pellizco sigo viendo lo mismo, mi casa en llamas, mi mama, mi papa, mi hermana junto con mi cuñado y nana están tirados llenos de sangre, me mira mis manos están cubiertas de sangre.

-Por favor despierta – dijo llorando – es un sueño, una pesadilla

-No lo es – oigo una voz a mi lado

Cuando volteo veo una chica de cabello platinado con ojos rojos mirándome fríamente, tiemblo al ver su mirada, pero a la vez ella no me da miedo, siento como si la conociera. Cuando ella habló, no escuché lo que decía, siento como de nuevo caigo a un vacío, esta vez cuando abro mis ojos me encuentro en una pradera verde con flores de varios tipos y colores.

-Otra vez evadiendo sus responsabilidades – oigo una voz a mi lado es una chica de cabello rosa, con ojos rojos – sé que es tedioso y sobre todo aburrido, perdón por no serte útil, con este cuerpo tan débil.

-No – me di cuenta de que las palabras salían por si solas – jamás serás un estorbo, como hermana mayor te debo de cuidar.

-Es al revés tonta – dice sonriendo dulcemente – yo soy tu hermana mayor.

-Jajajajaja – riéndome – lo sé, pero aun así yo te protegeré, daría mi vida para protegerte.

Su sonrisa estaba llena de calidez, me invadía mucha felicidad al verla sonreír de ese modo.

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Creo que mi sueño se adelantó mucho porque ahora estábamos esa chica y yo susurrando a escondidas con una señora mayor, se veía como la cocina, pero lo raro es que en vez de una estufa había leña.

-Es peligroso que se vayan – dijo la señora.

-Lo sabemos nana, pero ella ha cambiado tanto – dijo mi hermana – no sé qué le pasa, debemos buscar esa bruja para que nos diga que está pasando.

-Pero yo digo que debemos quedarnos y apoyarla, es nuestra madre – dije preocupada.

-Hermana prometo volver pronto…

Veo como agarra una capa que le extiende la señora, que, al darme la última mirada, se marcha por la puerta, suspiro porque tengo un mal presentimiento.

-Tu hermana sabe lo que hace y tú le enseñaste a que se cuidara – dijo la señora.

-Lo sé, pero no entiendo porque dices estupideces de que mi mama está loca – dije marchando me de ahí.

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Sin que yo pueda hacer algo, la escena cambia rápidamente con esa misma chica discutiendo conmigo.

-No puedes hablar en serio, ella no será capaz de hacer eso, son los rebeldes – dije gritándole.

-Sayumi escúchame por favor – dijo mirándome preocupada – sabes que jamás te mentiría de ese modo…

-Pero esos tipo te han llenado la cabeza de ideas locas, ella no mataría por poder – dije llorando – ella no mataría a los que no se pueden defender.

-Sayumi lo ha hecho, yo he visto por mis propios ojos como lo hizo sin dudarlo, porque se negaron abandonar su aldea – dijo llorando – la madre que conocíamos ya no existe…

-No puede ser cierto – dije abrazando – se supone que nosotros deberíamos de defender no atacarlos…

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En un parpadeo la escena cambia rápidamente a uno donde esa chica, mi hermana de ese sueño está en mis brazos herida, yo la sostengo entre lágrimas.

-Perdón – dije sin poder evitar llorar.

-No te preocupes – dijo con sangre en la boca – fue mi turno de protegerte, como siempre quise hacerlo - mientras tose sangre, la cual me salpica en mi rostro.

-Lo siento hermana, fue mi culpa pensé que ella cambiaría, pero yo – dije llorando fuertemente – lo siento, no te vayas yo…

-No siento dolor – dijo mirando con lágrimas en los ojos – debes …. Debes … detenerla… lo harás… verdad.

-Si lo hare – dije llorando – no gastes tus energías, por favor resiste.

-Sayumi – dijo con ojos entrecerrados – volverás …. Debes …. De decir… - tose sangre – la verdad… y … volver con él….

-Pero – dije llorando.

-Prome… me… te me… lo ….

Llore como nunca al ver que se había ido esa persona, es así como desperté llorando, ese sueño me toco mi ser, las lágrimas no paraban de caer, me acurruque en mi cama, además de que abrase un peluche de perro y llore. Porque ese sentimiento de culpa, nostalgia no se va se supone que fue un sueño. Entonces me levanto y me veo en un espejo que está de cuerpo completo en mi cuarto.

Me imagino a la chica de cabello platinado largo, con sus ojos rojos diciéndome “no lo es”, me caen más lágrimas de los ojos, acaso han escuchado de que nosotros los humanos renacemos pues ahora lo creo, yo renací y acabo de recordar parte de mi pasado, lo que haya pasado aun no lo recuerdo. Entonces los sueños que he tenido son fragmentos de mi vida pasada.