—Creo que eso bastará para la organización... Y luego podemos ir viendo como surgen las cosas, y si tenés alguna inquietud lo volvemos a charlar.— Adrik deja la tablet a un costado dónde había traído algunas ideas nuevas de seguridad.
La llegada de una Luna a la manada era muy importante, ya qué, prácticamente, era la persona más valiosa que podía ocupar todo el lugar, por eso mismo día que distribuirse la seguridad y las guardias.
Nada debía quedar al azar, por otro lado, debían de chequear cuestiones rutinarias, por eso mismo todos los lunes se reunían en la casa del castaño para charlar los temas más protocolares de la manada en absoluta soledad para ellos.
—No nos olvidemos también que para el evento de fin de mes vendrán a visitarnos los cabecillas de las manadas más cercanas y prá
