—"Estoy seguro que no te conviene que te vean peleando con tu mujer, el consejo tiene ojos en todos lados."— Amenaza de la misma manera qué le había hablado por su link personal.
—¡Carajos, no necesitamos entrar! ¡nos vamos a casa!— Muerde su labio inferior tomando a la rubia del brazo.
Adrik sonríe de costado. —¿En serio?— Se burla.
—¡Estás colmando mi paciencia hoy!— Bufa cerrando los ojos.
Samay va con su mirada de uno al otro como si fuera un pin pon.
—¿Estás seguro que vas a comportarte sí te la llevas a casa?— Ignora su comentario y sigue indagando en lo que le importa.
—¿Qué les pasa a ustedes dos que tienen que andar peleandosé de esa manera?— Samay se cruza de brazos y suspira realmente cansada por toda la situación.
—Vámonos.— Vanko demanda con su mandíbula tensa.
Samay l
