Yacob: Beth estaba frente a mí, con una chaqueta ligera y apenas si cargaba botas, se había quitado el maquillaje, así que ahora mismo su cara era conocida ¿Cómo le había dado chance de lavarse la cara y venir a buscarme? –Bien, hablemos. –Gracias –dijo colocando sus manos entre su boca, soplando aire caliente, claramente tenia frio, estaba helando y no tenía suficiente protección contra el frio. –Vamos a pasar, está helando y… –No, estoy bien –dijo– solo tengo frio. –Pues claro –exclame– ¿Por qué has venido a buscarme sin nada que te protegiese del frio? –Traigo una chaqueta –dijo como si eso lo explicara. –¿Cómo es que se te ocurrió venir a buscarme? –Yo… Me sentí arrepentida con cómo te trate, –admitió– y escuche que te irías, así que solo salí corriendo en pos de ti. –Así que