-Nico- Me paralice al ver a Alexandra, y cómo no si su actitud distaba mucho de la que esperaría en una situación donde me encuentra manteniendo a una mujer sujeta contra una pared. Luego de cerrar la fuerza, me inspiré seguridad y decidí aclarar aquel mal entendido que seguramente perjudicaría lo que mi mujer de ojos mágicos y yo habíamos cultivado. -Bien, si lo viste todo- dije nervioso sentándome frente a ella. Tenía los brazos cruzados a la altura del pecho- Entonces espero que hayas entendido todo de la forma correcta. Cariño, ella se me ofreció, como siempre ha hecho. Y yo no le he dado ni un suspiro de esperanza, en serio, no sé qué le pasa conmigo, yo-- alzó la mano y me detuve suspirando. Estaba asustado, ¿Por qué? Si no había hecho nada malo. -Lo vi todo- repitió- tambié