A Sara no le importó mucho la situación, no poseía sentimiento por Caspian, solo se casó para que el señor Peter no expusiera su identidad y de paso ganar tiempo mientras limpiaba su nombre, originalmente tenía pensado ser lo más descarada y odiosa posible con Caspian para que firmara el divorcio, pero debido a que él mismo la obligo a firmar eso ya no era un problema.
Asi que simplemente se dirigió a la cocina a buscar algo de comida cuando una de las criadas la visualizo sintió nervios de la situación. En ese momento Sara le sonrió para calmarla y demostrar que eso poco le importaba, se acercó a Julia y le pidió algo de merendar.
Julia asintió y se fue a preparar unos bocadillos. Sara salió de la cocina y se dirigió al comedor el cual colindaba con la sala, Sabrina al darse cuenta de la presencia de Sara sonrió de forma burlesca y empezó a besar descaradamente a Caspian, el cual no le impidió dicho acto. Mientras todo esto sucedía, Caspian sólo se dedicaba a observar de reojo el comportamiento de la que ahora era su compañera temporal de residencia, pero para su sorpresa Sara ni se inmuto sobre la situación, simplemente tomo asiento en el comedor e ignoro a la pareja, en parte eso enojo a Caspian, pensaba que se había casado por mi dinero o porque era guapo, así es como me decía la primera vez que nos reunimos ‘Hola Guapo’ durante la semana de preparación.
Al principio pensé que sólo era una del montón de admiradoras, pero después supe que era mi prometida, se veía bonita en la recepción, pero ahora estoy en brazos de otra mujer y ella no dice nada, estará enojada porque; la obligue a divorciarse el mismo día de nuestro matrimonio, es su culpa si no pidió nada, perdió su oportunidad es lo que pensaba Caspian mientras Sabrina no paraba de manosearlo y besarlo descaradamente, llego un punto en la cual Sabrina se había montado en su regazo mientras metía su legua hasta tocar la campana de su garganta, por un momento estaba disfrutando ese placer, pero luego recordó que Sara estaba sentada en el comedor, miro de reojo a la muchacha y se percató que sostenía una revista en su manos inmersa en su lectura, no prestaba atención a lo que sucedía a su alrededor y eso lo irritaba aún más.
Sin embargo Caspian ya se había enojado con solo la presencia de Sara y su indiferencia a la situación, tengo la impresión que si estuviese teniendo relaciones sexuales frente a ella, ni se inmutaría entonces, sin duda alguna se casó por mi dinero , pero no pidió nada durante el divorcio que diablos quería esta mujer, al casarse conmigo era una de las mil interrogante que tenía, Caspian aparto a Sabrina de su cuerpo y se levantó del mueble aterciopelado grisáceo, suave de última generación en mueblería edición limitada. Se acerco al comedor y tomo una silla en frente de ella, se le quedo mirando durante unos minutos, cuando de repente apareció la criada Carmen con unos bocadillos, los cuales sirvió a Sara, esta última levanto la mirada al darse cuenta de la comida miro a Carmen y le dio un gesto agradeciendo por la comida.
La criada le pregunto al Caspian si deseaba algo y el la ignoro, miraba de forma fulminante a Sara la cual apenas se había percatado de la presencia del hombre, dejo el libro que había estado sosteniendo para ignorar a la pareja en el mueble y de forma cortes le sonrió.
—señor Hilton que sorpresa. ¿Quiere comer? —No, gracias, estoy lleno. Comí bastante durante la ceremonia. Pero veo que tú no estás muy satisfecha que digamos. ¿Acaso quieres engordar? —No pude tomar un bocado, así que aprovecho para comer en este momento, espero que no le moleste. —Veo que te gusta leer. Dice esto en tono sarcástico. Mientras cambiaba de tema —No soy muy apasionada a la lectura, más, sin embargo, tenía hambre y no quería interrumpir. ¿El comedor está lo suficientemente lejos del mueble? ¿No le parece joven, maestro?
Las palabras lanzadas por Sara, lo que hicieron fue irritar más a Caspian. —Mira, no me gusta verte así que, si puedes mejor quedarte en tu habitación, mientras yo esté presente durante el mes sería perfecto. —Entiendo que mi presencia le incomoda, señor Hilton. Pero debe entender también que tenemos un trato durante este mes solamente estaré en esta casa, ya después me retiraré. Puede aguantar, ¿no? Al Fin de Cuentas, ya estamos divorciados. Un mes pasa rápido sólo ignóreme.
—Para ti es fácil ignorar para mí no y más aún cuando tengo un extraño en mi casa. Siempre he estado viviendo en esta casa mi privacidad, es muy importante. Si deseas comer de ahora en adelante, come en tu habitación o cuando yo no esté en casa. —Entiendo, señor Hilton, no volverá a suceder, apenas termine mi cena me retiro a mi habitación, mi intención no es incomodarlo, sólo deseaba comer un poco. —No quiero esperar a que te retires, si tu intención realmente no es incomodarme prefiero que no muestres tu rostro, mientras yo esté aquí, quiero que te retires ahora tengo visitas. Y tú presencia está interrumpiendo mi buen rato.
Sara le lanza una mirada fulminante, al hombre al mismo tiempo que le tuerce los ojos, se levanta y le solicita a una de las criadas que le lleve algo de comida a su habitación.
Caspian sorprendido y lleno de cólera por el gesto de Sara, les ordena a las criadas —no le darán ni un bocado, si no las despido a ambas, trate de ser amable pero no tolero la groserías.
Sara al escuchar queda boquiabierta, se enoja y le recrimina. — qué te pasa mezquino, ya me retiro a mi habitación como querías, déjame comer, aunque sea.
—tu falta de modales y respeto se debe a que no te educaron correctamente, además te atreves a llamarme mezquino, torcerme los ojos a la vez que me insultas, espeto furioso el hombre. Sara, sorprendida por el mal genio de su exmarido agradeció por dentro haber firmado el divorcio. Le sonríe de forma burlesca, le tuerce los ojos y vuelve a llamarlo mezquino. Las criadas sorprendidas, se miran mutuamente, y sin saber qué hacer, simplemente bajan la cabeza y se retiran de inmediato a la cocina. Al otro lado, en el mueble se encontraba Sabrina observando la escena mientras se reía a carcajadas y se decía así misma esto es muy divertido, Caspian por lo general no se altera por nada, ni pierde los estribos, esto es un verdadero espectáculo.
Caspian al, darse cuenta de que Sabrina se estaba burlando. Le agarro de las greñas y la sacó de la mansión, mientras Sabrina le gritaba que le lastimaba, a él no le importaba los gritos de la zorra, solo quería sacarla y reclamarle a la mujer, que le había quitado la calma. Apenas volvió, fue a enfrentarse a Sara más, sin embargo, ella ya se había retirado a su habitación. Caspian furioso, subió la escalera en dirección a la habitación de Sara, empezó a golpear la puerta para que le abriera, al cabo de un rato Sara abrió la puerta y se le quedo mirando mientras se cruzaba los brazos. —¿qué quieres, señor Hilton? ¿Ocurre algo? Le dice la mujer, con una sonrisa, poco amable.
Caspian, ya harto de su indiferencia, la empuja hacia la habitación, cierra la puerta. —no me haga enojar, señorita Cosette. Mi paciencia tiene un límite y usted lo está rebasando, sabes que siendo su esposo puedo disponer de usted.