Todas las miradas se dirigen a la joven que se desmayó, no le dan tiempo a Sofia de contestar pero Pablo se queda quieto al ver las atenciones de Martin hacia la morena, se maldice por quererla tanto no debería de afectarle lo que le suceda si ella lo rechazó finalmente es el destino que ella eligió aunque le duela no puede intervenir o ¿si?. Al cabo de unos minutos la morena cobra la consciencia, levanta la mirada y se encuentra con dos hombres totalmente opuestos... él primero sostiene su mano como si de un trofeo se tratara no deja de ver sus pechos a reventar en el vestido pues están llenos de leche, leche que no ha podido darle a sus hijas y no ha querido buscar la manera de cortar con la esperanza de tenerlas de nuevo y poder amamantarlas como merecen, cosa que le duele de sobre ma