Me sobresalté ante tal grito, girando lentamente mi cabeza, vi cómo Luke estaba a punto de desencajar su boca por lo separada que la tenía. Poco a poco me retiré de la habitación, pasé por el lado de Luke, pero como este estaba en shock ni cuenta se dio. Al salir, me encontré a Alec mirándome con una sonrisita divertida. —Vaya, que sorpresa —musitó. Le sonreí, estaba más sorprendida aún. ¡Lucy tenía diecinueve años! Sabía que Luke no la dejaría, siempre estaría para ella, por eso estaba emocionada. Lucy sería una gran madre, le daría lo que su madre no le dio a ella, y con la compañía de Luke y mía, nunca le faltaría amor al bebe que venía en camino. —Uff, demasiado, estoy muy feliz por ellos. —Alec sonrió por el entusiasmo que mostraba. —Serán grandes padres —comentó Alec. —Te creo, l