habían quedado tirados en la cama Liz sintiéndose horrible, porque había dejado que Joseph la tomara de esa manera, ella quería solamente hablar de su hijo, y no entendía como todo había ido tan rápido, se sentía una tonta, por sentirse débil ante él, parecía que su cuerpo lo deseaba, y lo hacia con desenfreno, ¿serán las hormonas? se preguntó pero debía tomar una decisión.
se levantó con prisa y fue al baño otra vez a vomitar, últimamente era su pasatiempo, vomitar cada un par de horas, y sentirse sumamente cansada, además de las interminables ganas de orinar.
Joseph se levantó tras ella y fue al baño.
"¿estás bien?"
"si" dijo mientras se dirigía a la pileta a lavarse la boca, él quedó en silencio y la observo, luego ella se lavo la cara y se dirigió de nuevo a la cama, Pero está vez
