“Todo lo que vemos o parecemos es solamente un sueño dentro de un sueño.” —Edgar Allan Poe
A finales de noviembre de 2010 la sonda Juno comenzaría su construcción, sería un proyecto no tripulado, Bolton se encargaría de equiparla con la tecnología más reciente, entre otras cosas pondría artefactos muy curiosos a primera vista.
Y resultaban curiosos por una razón, no eran usuales, algunos de ellos no tenían incluso correlación con lo que en teoría se mediría, sin embargo, el ingenio de Bolton ayudó a justificar la presencia de cada uno, no pierda de vista que detrás de Bolton estaba Viling, así que gran parte de todo aquello era obra de este último.
Así es como se conseguiría colocar dentro de la sonda un radiómetro de microondas, y es que al parecer Viling estaba totalmente decidido a traspasar el espesor de la atmósfera del planeta, pero además esto serviría para usarlo como una especie de sonar de ondas electromagnéticas. Aquello se justificaría diciendo que era para medir con una mejor exactitud los niveles de agua y amoníaco.
También utilizarían un mapeador de rayos infrarrojos, Viling y Bolton querían detectar la presencia de cuerpos ocultos en el planeta, resultaba risible que en el reporte dijeran que esta tecnología era solamente para poder determinar la forma de las nubes del planeta.
Llevaba un magnetómetro, pues Viling estaba dispuesto a llegar al fondo de la anomalía así que necesitaba medir la fuerza y dirección del campo electromagnético, aunque se dijo que era con la finalidad de mapear una estructura tridimensional.
Llevaba un sensor de ondas de radio por si alguna r**a alienígena avanzada quisiera entrar en contacto, aunque se dijo que era por aquello de las auroras. En fin todo estaba bien justificado el viaje duraría cinco años y 11 meses, por lo que tenía que haber un sistema de auto calibración que se pusiera en marcha cada 12 meses.
La sonda Juno partiría a mediados de agosto de 2011 sin embargo, más de dos años tuvo que orbitar la Tierra, durante este periodo se harían diversos ajustes y correcciones de ruta, la intención del orbitar era aprovechar la energía de la tierra para alcanzar una velocidad de setenta y ocho mil kilómetros por hora.
Durante el tiempo que duró el viaje Viling se dedicó a continuar sus visitas y colaboraciones con distintos investigadores, también se enfocó en otros estudios sin embargo, nunca perdió de vista la sonda Juno, esos cinco años como podrá usted imaginarse fueron eternos.
El 5 de julio de 2016 la sonda Juno llegaría a la orbita de Júpiter y se iniciarían las mediciones, Viling estaba muy interesado en esa anomalía magnética así que no perdió tiempo, gracias a los artefactos que habían colocado fue fácil seguir el rastro del campo magnético.
- ¡Lo he encontrado! - dijo girándose hacia Bolton, quien se acercó con cara de curiosidad.
-mira aquí- dijo -el campo magnético del planeta lleva una línea continua que corre verticalmente de un polo al otro sin embargo, a esta distancia donde debería haber un vértice se curva hacia dentro provocando una gran inestabilidad en el sistema, esta inestabilidad permanece siempre en la cara opuesta a donde podemos encontrar la gran mancha roja, la cual en realidad es una depresión y tiene un profundidad, es decir que la fuerza ejercida por el campo magnético de un lado desplaza las corrientes de viento en dos direcciones y hacen que estas choquen dando origen a la gran mancha. No es todo,- siguió -esta anomalía magnética debe estar causada por algo que hasta el momento no hemos podido ver pero que tiene una energía monstruosa, tanto como para curvar el campo magnético y alterar el orden de las corrientes de aire en un planeta, sabes, es algo parecido a lo que sucede aquí en la tierra con la Luna y las mareas, pero estamos hablando que a nivel colosal, por lo que es posible que se trate de una luna o incluso de un micro agujero n***o, no estoy seguro de ello pero habrá que buscarlo con ayuda de la sonda.-
El 19 de octubre de 2016 sucedería algo inesperado, eran alrededor de las 3 de la madrugada cuando Viling fue despertado abruptamente por una llamada, era urgente uno de los motores de Juno se había averiado.
Se vistió tan rápido como pudo, subió a su precisos automóvil gris y manejó hacia el observatorio lo más rápido posible, al parecer algo había afectado el motor, pero no físicamente, sino que había causado interferencia con el funcionamiento y ahora mismo la sonda se encontraba dando vueltas alrededor de su propio eje.
Después de cerca de 36 horas lograron reactivar con éxito el motor, pero, ¿Qué había sido eso?, Viling tendría que esperar 2 meses a que llegaran y pasaría las siguientes tres semanas sentado delante de su computadora revisando una y otra vez las grabaciones de la sondas y entonces lo vio.
La orden que daría consternaría al equipo girar la sonda 218 grados y tomar una serie de capturas utilizando distintos espectros para conseguir algo, sin embargo, al girar la sonda solo se podía ver un vacío espacial no parecía haber nada de especial, las imágenes se revelarían hasta abril de 2017 en donde las sospechas de Viling se materializaron, había un cuerpo del tamaño aproximado al de Marte orbitando muy de cerca al planeta Júpiter, un cuerpo que nadie nunca había notado pero que estaba ahí presente, un satélite, Viling lo llamó V7092017, pero el equipo comenzó a llamarlo satélite “Viling”.
Para el doctor Viling su descubrimiento era la solución del enigma, resulta que cuando Demian entró en medio de los campos gravitacionales de Júpiter y V7092017, la monstruosa presión entre ambos cuerpos atrayéndolo al mismo tiempo hizo que se desintegrara arrojando fragmentos hacia un lado y hacia el otro.
Viling comenzaría entonces a sondear el nuevo planeta, el día 1 de septiembre de 2017 publicaría junto con Bolton un artículo en la prestigiosa revista Astronomy and Astrophisics, en el cual daba a conocer su descubrimiento del nuevo satélite que orbitaba Júpiter.
En este detallaba que a pesar de que su gravedad solo era de 1.2 veces la de la Tierra, su campo electromagnético era 500 veces más potente, también se había observado que emanaba de vez en cuando rayos de energía de alta densidad, de hecho, el fallo del motor de Juno se había debido a este fenómeno.
La razón por la que no se había observado antes es que su superficie, en un inicio se creyó negra, sin embargo, un análisis más minucioso reveló que estaba echa de metal sólido y funcionaba como un espejo que reflejaba la negrura abismal del espacio por lo que era una especie de camaleón espacial.