When you visit our website, if you give your consent, we will use cookies to allow us to collect data for aggregated statistics to improve our service and remember your choice for future visits. Cookie Policy & Privacy Policy
Dear Reader, we use the permissions associated with cookies to keep our website running smoothly and to provide you with personalized content that better meets your needs and ensure the best reading experience. At any time, you can change your permissions for the cookie settings below.
If you would like to learn more about our Cookie, you can click on Privacy Policy.
Durmieron esa noche preocupados por lo que dijo la abuela y se despertaban al más mínimo ruido, además, había muchos mosquitos al estar cerca de la quebrada. Llegó la mañana, comieron un poco de las dulces frutas. Mailk y Fernando fueron a caminar y pronto pudieron cazar un ave grande, así que llegaron muy contentos a donde estaban los demás. Esa tarde comieron carne por primera vez. Se cumpliría la segunda semana y parecía que las cosas empezaban a cambiar para bien. Para un grupo que vivía a la merced de lo que un planeta tan inestable pudiera brindarles, era una gran esperanza. Todos estaban degustando de la deliciosa carne asada y después cavaron un hueco donde el agua se estancó un poco y les llegó por encima de las rodillas, para poder así darse un baño; menos mal, porque ya no