Apenas cierro la puerta dejo escapar un suspiro enorme, ha sido agotador pero al menos mi día terminó como comenzó, tranquilo y con un buen sentimiento. - Fue agradable - siento como el rubio me abraza y me permito perderme entre sus brazos. No es raro abrazarnos entre nosotros, pero nunca de este tipo tan intimo y embriagante, y sinceramente no los vi posible hace dos días, cuando juraba que lo mío era unidireccional. Quien diría que al final del día mi autoestima y confianza propia puedes flaquear. - Fue pesado, pero agradezco que todo terminara bien ¿mis hermanos fueron muy molestos? - dejo que se siente en la barra desayunador y comienzo a hacer algo sencillo para comer antes de dormir. Se supone que las reuniones familiares de los domingos son hasta un poco antes de las cuatro, pu