Estamos en la camioneta de camino al centro comercial Andino, el mall más exclusivo de Bogotá, y en donde está ubicado el local de Oscar de la Renta. No nos queda muy lejos de casa, pero aun así tenemos que soportar algo de tráfico para llegar. Nuestro chófer y uno de los tantos escoltas que tenemos van adelante, mientras que Fer y yo estamos en los asientos de atrás, él respondiendo mensajes de sus clientes en el celular, y yo limitándome a ver publicaciones en i********: de gente a la que ni siquiera conozco pero que me gusta su contenido. Alejandro dijo que Gustavo nos caería en el local a la hora en que Fer dijo que llegaría, y ya Carolina me confirmó por un mensaje de texto que, al igual que nosotros, también están tratando de sortear el tráfico de la ciudad. Carolina es la esco