Capitulo 35

899 Words
—Yo..... yo... lo siento, debí tocar—después de reaccionar Dania habló y cerro la puerta, huyendo a la suya —Ey nena estás pálida, ¿qué pasó? ¿Todo bien?—chocó con el castaño, este la sostuvo de los brazos —Sí, si todo bien, solo que ya quiero refrescarme—sonrió nerviosa —De acuerdo, te acompaño, te espero en la alberca, ¿sí?—este la miro a los ojos y beso su frente —Ahí te veo—camino a su habitación Vaya, sí que había cometido un error al entrar así como así a la habitación, había olvidado que él estaba ahí, ahora sentiría pena al verlo a los ojos. Se fue a poner su sexy bikini que Owen le sugirió usar, al principio se sintió con temor de usarlo, pero al demonio, ¿quién se iba a fijar en ella? Se preguntó. Al ir hacia donde los chicos la esperaban, a su paso iba acaparando la mirada de los caballeros y de alguna que otra mujer envidiosa, miro a Landon a lo lejos y este al verla se quedó boquiabierto —Linda, te ves hermosa, radiante, sensual, bella...—hablaba encantado, pero Owen lo interrumpió —Cielos nena, te queda espectacular ese bikini—Dania rodó los ojos —Exageran—dijo una Dania sonrojada —Para nada hermosa, te ves bien—la beso en los labios y llegó Bill —Oye Bill, ¿verdad que Dania se ve linda?—dijo Owen, Dania le lanzo una mirada de terror —Ehh.... sí... si, te ves bella—dijo el ojiverde nervioso —Bueno, hay que ir a refrescarnos—dijo el castaño ignorando aquel momento, tomó de la mano a Dania y se metieron a la alberca, Bill y Owen se acostaron en los camastros —Ella te gusta—hablo de la nada Owen —¿Disculpa?— el ojiverde lo mira con sus gafas de sol puestas —No te hagas, sé que no te conozco realmente, pero en tus ojos se ve que mueres por ella—este mantenía su mirada hacia arriba —Yo... yo bueno...—decía con tartamudez —Puedes confesármelo, no le diré nada a ella, lo prometo—Owen se sentó y ahora miraba al ojiverde —Pues tienes toda la razón Owen—Bill sonrió como un niño enamorado —Lo imaginé bien—ambos miraban hacia Dania y Landon —Me gusta demasiado, como no tienes idea, es tan hermosa, tan sencilla y única—el ojiverde decía sin titubeos —¿Y qué te impidió andar con ella? ¿Tu compromiso con tu ex? Sabes, fue muy estúpido que dejaras pasar tiempo, no debiste mentirle—Bill bajo la mirada —Ya lo he oído muchas veces—soltó un suspiro —¿Y no piensas hacer nada ahora? ¿Dejarás pasar más tiempo? Tú estarías ahora con ella en la alberca—de nuevo miraban a Dania —No puedo, por más que desee estar con ella, no puedo hacerle eso a él—dijo con pesadez —Landon es un buen chico, admito que es más de lo que yo esperaba, pero en la guerra y en el amor todo se vale—dijo Owen para después meterse a la alberca, dejando a un Bill pensativo Los tres chicos jugaban dentro de la alberca, Bill solo los miraba y reía, se dedicaba a beber y fumar, lo de siempre. Más tarde él se metió, los cuatro se dedicaban a jugar, en un mal movimiento, Dania se iba a ahogar, cuando Bill pudo sostenerla por detrás y evitar que eso pasará, Dania se sintió rara al sentir su bulto rozar en los glúteos, eso Bill lo sintió, ya que su amiguito comenzaba a despertar (. . .) Bill les había hecho saber que irían a un bar muy popular de Hawái, todos salieron de la alberca, se dieron una ducha, se alistaron y emprendieron camino al bar, utilizaban ropa ligera que los hiciera verse bien. Al estar en el bar, varias fans se tomaron fotos con los guapos actores, con Dania no hubo excepción, solo que en esta ocasión los hombres lo hacían —Bien caballeros, esta hermosa tiene que irse—dijo el castaño tomando por la cintura a su novia —Me salvaste de un acoso—ambos se rieron y fueron a su mesa La noche avanzaba, los tragos seguían, la música sonaba de una manera tan relajante que hacía que los cuatro chicos bebieran. Dania era la que más tragos llevaba, dejándose llevar por la música y el baile. Totalmente, estaba ebria y su necesidad de ir al baño era muy seguido, cada vez que iba, Landon y Owen la acompañaban, pero estos estaban ocupados, Bill se ofreció a acompañarla, la espero afuera del baño, pero escucho un ruido —¿Dania estás bien?—preguntaba el ojiverde acercándose para oírla —Me...me caí soy una estúpida—reía Dania como loca, Bill no tuvo de otra más que entrar y levantarla —Ven, vamos afuera—este la sujetaba de la cintura —Tú....tú me deseas.... te vi...—susurraba al oído del ojiverde —No sabes lo que dices—decía Bill nervioso —Bésame...... bésame—esta se dejó ir a los labios de Bill para después seguirle el beso
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD