Narra Casandra
—Te ves hermosa esta mañana —dice tan pronto como subo al auto.
Elegí usar una falda corta, lo que dificulta subirme con elegancia al deportivo de perfil bajo. La ventaja es que soy recompensada con su mirada apreciativa que abarca mis piernas hasta... ya sabes.
—Espero que hayas dormido mejor que yo.
—Oh, ¿no pudiste dormir? —pregunto con demasiada ansiedad.
—Como dije, es una vida solitaria.
—Ya debes estar acostumbrado —le digo.
Mierda. Parece que estoy diciendo que después de todos estos años no quiero que piense que es demasiado mayor para mí.
Él simplemente se ríe. Jared es muy relajado, todo le sale como anillo al dedo y acepta lo que viene.
—Sí, debería, ¿no? Excepto que nadie me advirtió que iba a conocer a una chica por la que me sentiría solo cuando ella
