NARRA BRIAN La alarma de mi celular sonó, pero yo ya estaba despierto. Al igual que todas estas noches. Por primera vez en mi vida estaba sufriendo de insomnio. Sabía que no era bueno justo a un día de que empezara la temporada de recitales. Podría desplomarme en cualquier momento, incluso en pleno baile. Por un momento entonces agradecí ser bailarín de baja categoría, porque bailaba atrás, y si me desmayaba, el público no se daría cuenta. Eran los solistas los que llamaban la atención, la gente nunca miraba a los bailarines de atrás. Ni siquiera sentía el estrés que estaban sintiendo todos los de la compañía en este momento. No me importaba nada. Lo único que ocupaba mi mente era Ian. No podía creer que me estaba haciendo esto. Aunque por una parte lo entendía, él quería ser papá, y