Esko resopló, su jefe siempre le dice que no tardará y cuando está con Yannick nunca es así. Mirar a los transeúntes pasar y que las chicas giren siempre que le dan la espalda le aburre muchísimo, no hay mujer que se resista a voltear la mirada para poder verlo una vez más, solamente esa pelirroja. Antes de seguir con sus pensamientos sobre esa chiquilla, su móvil anunció un mensaje, sin demora lo sacó del bolsillo de su chaqueta para echarle un vistazo, no tiene nada mejor que hacer. ―No jodas. ―Gruñó al leer el mensaje bastante detallado que le enviaron. ―Esto es malo. ―Negó leyendo el informe que para su suerte o desgracia estaba bien detallado. ―Hemos llegado. ―Vik le abrió la puerta a Nick para que subiera al coche, pero ver el gesto de su guardaespaldas mientras tiene la vista fij