Dejé los cuadernos que ya no necesitaría en mi casillero, y cuando estaba acomodando unos libros que estaban desordenados, mi celular pitó anunciando que alguien me había enviado un mensaje por w******p, era de Jeremy. “Ven al salón de química, está solo” Dudé en ir, sabía que no solo quería verme para simplemente hablar, pero aun así la curiosidad me mataba. -Mi bella flor, saliste corriendo de la clase sin siquiera esperarme – escuché la voz de Ethan tras de mí y me sobresalté. -Lo siento, tenía que…- no me dejó terminar, me calló con un beso en los labios. Ahora que éramos oficialmente novios, Ethan no tenía la necesidad de besarme a escondidas, podía hacerlo en los pasillos de la escuela. -Tus labios son suaves ¿lo sabías? – me susurró al oído apenas separamos nuestros labios.