Comenzamos con una nueva historia, miles de gracias por dedicar tu valioso tiempo a las líneas que con tanto cariño escribo para ti apreciable lectora.
Sinopsis...
Nuestra primera noche de casados fue maravillosa, Federico me hizo el amor de una manera tan dulce, fue tan paciente conmigo, pero al despertar él no estaba a mi lado, me preocupé cuando la doncella me comento que salió de viaje, él no se había despedido, creí que quizá algo le molesto, tal vez no disfruto como yo nuestra primera noche de casados, pero dejo claro cuando regreso que solo se fue por trabajo, viajaba demasiado, yo era paciente, aun que no habíamos tenido intimidad en un año de casados, siempre estaba agobiado, demasiado cansado para intimar, yo comprendía, pero lamentablemente pronto descubriría que lo que yo sentía por él no era correspondido, que a pesar de amarlo, me dejaría claro que él no lo haría, que por mi culpa era el hombre más infeliz de la tierra, ahí estaba yo, triste porque no tenía idea de lo que sucedía...
En ocasiones creemos en el amor verdadero, la historia mágica donde el hombre que amamos nos corresponde de la misma manera, pero lastimosamente no es así, esta es la historia de Andrea Rinaldi Veron, una preciosa chica de 18 años que se enamoró del hombre equivocado, pero como puedes decidir de quien se enamora el corazón, una joven mujer de cabellos castaño oscuro, preciosos ojos verdes claros, parecían reflejar lo que veían, ella era estudiante en la Universidad, recién la comenzaba, su inseparable Jonathan Moran, su inseparable desde muy pequeños, era el único que sabía del interés de Andrea por el apuesto Federico Garzon, hijo proveniente de una familia muy importante de la ciudad.
Aun cuando ella lo veía y su corazón latía con tanta fuerza, él parecía no tomarla en cuenta, claro, tenía a su lado a una preciosa rubia impresionante, él era jugador de fútbol americano, ella una animadora, claro, la pareja perfecta.
- La verdad no sé que es lo que le ves, es un patán, va por ahí viendo a los demás como si fuésemos simples cucarachas, él siente que nadie en el mundo lo merece, porque te gustaría ese niño rico.
Me quedo escuchando a Jonathan, pero la realidad es que en ocasiones dejo de escucharlo por unos segundos, Federico camina hacia donde estamos, muchas ocasiones me imagino que se detiene a mi lado, besa mi mano y me invita a salir con él, pero claro, es solo un sueño, él está enamorado de su novia, Grace, una rubia hermosa, claro, la pareja perfecta.
Su familia es muy conocida en la sociedad, ellos van a fiestas a las cuales mi familia también asiste, mi padre es un empresario importante, que ahora solo recibe las ganancias del trabajo que realizo por años, él es un buen hombre, solo que su pensamiento es digamos... Complicado, mi padre me ama de una forma que yo jamás he comprendido, él siempre dice que seré la heredera de todo, pero que mi esposo será quien se encargue de manejar todo, pues yo soy solo una mujer, y las damas solo sirven para hacerse manicura y gastar el dinero de sus esposos, no olvido las palabras que me dice, y que aun cuando mi madre dice que no ponga mayor atención no se olvidan tan fácilmente.
- Tú serás rica toda tu vida Andrea, pero cuando llegue el momento tu esposo será quien maneje los negocios de la familia, no pienso dejar que tú lo eches a perder querida.
No debería tomarlo a mal, él fue criado con ese pensamiento, pero sí, duele, aun más porque estudio para ser útil en los negocios de la familia, mi padre ha vendido empresas, haciendo una fortuna que como él dice no nos alcanzaría la vida para acabar con ella.
Él sufre problemas cardíacos, así que no podrá seguir muchos años más manejando el nivel de estrés que ahora, por ello mi madre y él han decidido vender, solo quedarse con algunos negocios.
¡En muchas ocasiones me reprende por estudiar, siempre dice que no necesito hacerlo, que jamás lidiaré con la presión de los negocios, la misma historia de siempre, tu esposo será quien se encargue de los negocios Andrea!!
Pero yo deseo ser útil, quizá no ser la presidenta de una empresa, pero si ayudar con lo que se necesite, no ser solo la esposa perfecta que luce bien al lado de su esposo, pero aún no pienso en matrimonio, aunque sé que si mi padre encuentra a un buen prospecto no me preguntara si deseo casarme, solo me informara que lo haré, lo sé, lo he sabido desde hace años, mi madre me ha preparado para ello.
- Oh Jonathan, quisiera no verle, solo hacer mi vida con normalidad, pero mi corazón parece querer salir de mi pecho cada vez que lo veo, desearía superarlo, pero estoy enloqueciendo, cada noche sueño con él, con su perfecto rostro, su cuerpo tonificado por el ejercicio que hace, míralo, es perfecto, creo que si fueses mujer estarías tan enamorada de el como lo estoy yo...
Pero Jonathan se molesta, él es mi mejor amigo, y claro, se preocupa por mí, es sincero, la persona más dulce que existe en mi vida, él conoce cada secreto de mí, así como yo de él.
- Jamás, si fuese mujer creo que lo odiaría aún más, la realidad es que amiga mía, estás perdida, olvídalo, él tiene novia, y sabes que esa Grace es un maldito escorpión cuando se trata de cuidar de su novio.
Hace algunos meses una chica, Penelope se había propuesto enamorar a Federico, él por supuesto no hizo caso a la joven, era muy bella, pero está perdidamente enamorado de su novia.
Cuando Grace se enteró de las intenciones de Penelope la amenazo, contó por ahí cotilleo sobre ella, toda la Universidad creía ciegamente lo que Grace dijo, aun que Jonathan y yo pensamos que solo fueron mentiras.
Decía que Penelope era una enferma s****l, que había tenido tantas parejas que aborto en varias ocasiones, que tenía enfermedades de transmisión s****l, así que todos se alejaron poco a poco de Penelope, al punto de sentirse tan incómoda y cambiarse de Universidad, así que todas aquí sabemos que por cuidar a su novio, Grace es capaz de cualquier cosa.
- Lo sé mi querido amigo, pero por ello es que jamás intentaría nada con él, sé que la ama, se nota desde lejos, y además jamás me vería con atención, está cegado por ella, no tengo esperanzas, pero... déjame soñar tranquilamente con él.
Jonathan es maravilloso, pero parece que odia a Federico, quizá como él dice por qué se siente superior a los demás, todos sabemos que sus padres le heredaran las empresas, que él está listo para ser empresario, solo necesita tener un título, cada vez que lo veo mi mente divaga, pienso en él, en mí, en que me encantaría poder tener su atención por unos segundos, aun que eso jamás sucede.
Cuando las clases terminan voy a la academia de danza, amo hacerlo, una de las cosas por las que mi madre deja lo que tiene que hacer al igual que mi padre para ir a verme, mi madre siempre dice que la danza es el mejor ejercicio para una mujer, te convierte en una delicada flor, y al mismo tiempo te ejercitas para no subir de peso, pues en esta sociedad en la que vivimos no puedes descuidarte jamás, las chicas regordetas no están bien vistas, mis padres siempre han cuidado esa parte de mí, por ello mamá me prohíbe consumir comidas de la calle si no es solo una ensalada, jamás he probado una de esas hamburguesas tan famosas de renombre, ellos dicen que son malas para la figura de una hermosa señorita.
- Hola, Andrea, como va la Universidad.
Pregunta una amiga que hice en las clases, ella es menor que yo, pero me agrada porque es una chica muy dulce.
- Bien, la verdad no me quejo, y tú, como vas con el colegio...
- Sabes que el álgebra no es lo mío, odio las matemáticas.
He ayudado a Sarah en varias ocasiones, ella es proveniente de una buena familia, en la que sus padres al igual que el mío creen que la educación de la mujer solo debería enfocarse en las clases de etiqueta o como ser una buena esposa...
Pero al igual que yo, Sarah busca hacer algo más con su vida, quiere estudiar y ser una gran abogada, ayudar a los que no pueden pagar por un servicio así, que por ser pobres en muchas ocasiones no tienen la oportunidad de probar su inocencia.
Eso me agrada de ella, pues a pesar de ser una chica de sociedad, que viene de una buena familia no piensa solo en ella, sino que busca hacer algo provechoso con su tiempo.
Cuando termina la clase de danza voy a casa, al llegar mi padre me observa con mirada reprobatoria, pues me ha dicho que enfoque mi tiempo en cosas más productivas.
- Hola, papá.
- No sé cuál es tu necedad de seguir estudiando, ya te lo he dicho, serás una esposa que jamás tendrá necesidad de hacer nada, vivirás en una preciosa casa atendiendo a tu esposo e hijos, no quiero nietas, solo varones Andrea.
Porque siempre me deja bien claro que no desea nietas, no sirve de mucho ser mujer en esta familia, donde se necesitan varones para seguir con el linaje de la familia.
Es muy duro escuchar a mi padre, pues claro, él tiene sus pensamientos, pero es más duro saber que aun ni siquiera estoy casada y él ya tiene planes para mí, hijos varones, como si eso fuese algo que nosotros decidiéramos.
- Te lo he dicho padre, quizá no manejaré una empresa, pero quiero ser útil de alguna manera, solo déjame seguir con mis estudios, es todo lo que te pido.
Él suspira pesadamente, y me dice que la comida esta lista, que pase al comedor después de cambiarme.
Pues aún llevo la ropa de danza.
Voy a mi habitación y me doy un baño, me cambio y bajo para comer con mis padres, quienes ya están a la mesa leyendo el periódico mi padre y mi madre con su móvil enviando algún texto.
¿Vaya, supiste que la hija de los Fresher se ha comprometido, la boda será en un mes, demasiado rápido no lo crees?
Le dice mi madre a mi padre.
- Quizá necesitan apresurar las cosas, habrán cometido algún descuido y deben cubrir la imagen de la familia, te aseguro que lo siguiente que harán será decir que su primer nieto nació uno o dos meses antes, para que nadie sospeche que al casarse ya estaba preñada la joven Fresher.
Mis padres hablan de esa joven como si fuese algo normal, no lo sé, no me gustaría ser el centro de una murmuración como esa.
- Buenas tardes, disculpen la tardanza.
Mi padre me observa y habla de manera dura.
- Por ello Andrea, debes ser muy cuidadosa con lo que haces, jamás pierdas tu pureza, pues es lo primero que busca un hombre en una mujer, nadie desea a la joven que ha estado con uno y otro hombre, no, so no es lo que deseamos para ti, queremos sentirnos orgullosos, de que el día que te cases seas pura en su totalidad.
Eso es algo que sé desde hace mucho, mis padres son sumamente conservadores, así que cuidan de mí, no tengo permitido asistir a fiestas, viajo con el conductor, quien se asegura de dejarme en los lugares a los que debo ir, ya que mi madre le entrega los horarios cada semana.
Sirven la comida, está todo delicioso, y aun cuando desearía pedir más, sé que no está bien visto, mi madre me observa, limpio mis labios con la servilleta y agradezco la comida.
- Todo estuvo delicioso, gracias...
Mi padre dice que puedo retirarme y ellos van hacia su despacho, yo subo a mi habitación y charlo por videollamada con Jonathan, que está revuelto con unos problemas de la Universidad.
- No cabe duda que no sé que haría sin ti, me bloqueo y no logro concentrarme de nuevo Andrea.
Jonathan es un buen estudiante, pero cuando algo se le complica parece bloquearse y no comprende, pero con paciencia logramos que avance.
- Lo sé, soy la mejor amiga que podrías tener...
Le digo sarcásticamente, pues soy la única, él es demasiado serio, no le gusta entablar conversaciones, así que su única amiga hasta el día de hoy soy yo, dice que más vale bueno conocido que malo por conocer.
-Vaya tu presunción lo arruino Andrea.
Ambos reímos, la verdad me la paso tan bien con él, puedo hablar de lo que sea, sabiendo que él me comprende, no me juzga, excepto con el tema de Federico, pero siento que es más su preocupación la que habla y me reprende.
Le cuento lo que escuche de mis padres de esa joven que está próxima a casarse, y me sorprende que sus padres también han escuchado esas murmuraciones de la podre Darla Fresher, que desea casarse de inmediato para ocultar un embarazo.
Es tan triste que una sociedad se encargue de manchar el nombre de una pobre joven, la realidad es que si esta o no embarazada es solo cosa suya, nadie debe opinar al respecto, porque creemos que tenemos el derecho de hacerlo, quienes somos para hablar mal de alguien, pero así son las cosas, siempre hay un cotilleo sobre alguien, sobre el empresario que va en decadencia, sobre la mujer de sociedad que engaño a su esposo, en fin, en los eventos siempre hay algo de que hablar, o mejor dicho alguien.
Me despido de Jonathan, él me desea buenas noches al igual que lo hago yo, voy a la cama para mañana tener un nuevo día, y quizá con suerte esta vez al llegar pueda estar cerca de él, al menos percibir su aroma, ese que me envuelve cuando pasa a mi lado.
Pero para mí en una ocasión fue tan intenso, lo sentí tan cerca, él había llegado a ayudar para sacar una bebida que quedo atascada, mi te dé hiervas, movió la máquina como si no pesara nada, y la botella cayo para que pudiera tomarla, Siento que estoy enamorada de él, no sé el por qué? Solo esa ocasión que me pidió cambio para llevarle a Grace una bebida de la máquina, pues solo bebe agua embotellada de manantial, una chica de gustos exquisitos, le di cambio, de más, él me lo regreso y agradeció, no sonrió, no dijo nada más solo gracias y se alejó.
En esa ocasión yo lo observe hasta que llego al lado de su novia, pero me gire nerviosa cuando el noto que lo veía, gracias al cielo ella no se dio cuenta, o ahora seria yo la que terminaría en cotilleo de mi Universidad....
Estudio Medicina, pero tomé este semestre un pequeño cursos de empresariales, por ello cruzo con las clases de Jonathan, uno no sabe que es lo que el destino le depare, así que aún cuando mi pasión es la medicina quizá en algún momento podría ayudar a mi padre, no lo se.