Capítulo 7
649 Words
Me las va a pagar, de alguna forma me voy a vengar.
Narra Leonor.
Por suerte Julia está calmada, le puse un poco de su música favorita. Charlamos de otra cosa y escucho el tono de mensaje. Veo la pantalla del celular y me mira.
–¿Quién es?
–Eugenio. –Suspiro.
–Parece que no te agrada mucho el mensaje.
–Quiere que vayamos a comer a algún lado.
–Y anda.
–No te voy a dejar sola.
–Pero anda.
La miro y le escribo el mensaje a Eugenio.
–¿Salen a comer esta noche?
–Le dije que no, que voy a salir con vos.
–Leonor anda a divertirte.
–Vos tenes que divertirte, las dos vamos a salir.
Ella sonríe y asiente.
–Esa sonrisa quiero que me des. – Contenta.
Me abraza y sonrió.
–Gracias.
–No me des las gracias, te quiero.
Nos separamos.
–Me voy a dar un baño y dentro de un rato salimos.
Me levanto del sillón y subo las escaleras.
Narra Lorenzo.
Al menos estoy más tranquilo, solo espero que mi papá cumpla con su palabra en disculparse con Leonor. No quiero estar en contra de el pero tiene esos arranques que no me gustan para nada. Ya se que nunca va a cambiar pero que sea más comprensivo con otros. Desde que vi a esa mujer no se que me pasa, es como si no quisiera que mi padre la trate mal. Ahora estoy tranquilo en mi casa. Despejo mi mente de todo pensamiento sobre Leonor y escucho el sonido de mi celular. Miro la pantalla y veo que es mi padre.
–¿Qué pasa papá? Recién nos vimos.
–Ya se Lorenzo pero te llamo para invitarte a comer, la última cena que tuvimos con tu madre salió muy mal.
–¿Invitaste a mamá?
–Si, hable con ella recién.
–Está bien, ¿a donde vamos?
–A las 8 paso por tu madre y después te vamos a buscar.
–Listo, entonces nos vemos más tarde.
Cortó la llamada y suspiro de alivio, al menos quiere remediar la situación, es un avance.
Más tarde me doy una ducha y busco que ropa ponerme.
Narra Leonor.
Es de noche y salgo con Julia de la casa, vamos con su auto, arranca el auto y nos alejamos de la calle.
Llegamos al restaurante y un hombre nos conduce hasta nuestra mesa, corre las sillas para sentarnos y pedimos la comida.
Después de unos minutos nos sirven el vino y brindamos.
–Porque vas a pasar este momento de mierda.
Ella me sonríe y chocamos las copas.
Tomo un sorbo y casi escupo el vino cuando veo al gruñón con Lorenzo. Lo último que me faltaba. Mi hermana se da cuenta y frunce el ceño.
–¿Te pasa algo?
–No, estoy bien.
–¿Y porque esa cara?
Vuelvo a mirar y estaban acompañados de una mujer mayor, parecía que es la esposa del gruñón, miré para mi hermana cuando me di cuenta que el me miró.
–¿Te sentís bien?
–Perfectamente.
El mozo volvió con nuestra comida y empezamos a comer, podía sentir varias miradas sobre mi.
Narra Lorenzo.
Parece que la voy a ver seguido a Leonor, esta muy hermosa y está acompañada de una mujer, debe ser la amiga o la hermana. Miro a mi papá, que tenía su mirada fija en ella. Mi mamá empezó a hablar.
–Que bueno que estamos los tres juntos. –Animada.
Mi papá no está muy feliz.
Pedimos la comida y mi padre se acomoda.
–Ya regreso.
Asentimos y vuelvo mi vista a Leonor. Me gusta algo en ella, no puedo dejar de mirarla y aunque sea una molestia, me gusta. Me doy cuenta que esta incómoda, ¿será por nosotros? No lo creo. Algo tengo que hacer, pero no puedo levantarme de la mesa, esperare a mañana.
Narra Anibal.
La veo en todos lados, me choca el auto y ahora tengo que soportar su presencia. Lo que tiene de linda, lo tiene de loca y encima feminista. Me lavo las manos y salgo del baño. Camino hasta mi mesa y trato de pasarla lo mejor posible, no voy a dejar que ella me amargue el día.
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