La visita con Sonia terminó, ella se despidió de los chicos con un espero volver a verlos pronto. Subieron al auto y se dirigieron a la casa de la manada.
–¿De dónde conocen a Sonia?
–Tiene un par de años que se mudo a la manada, nos encargamos de su estadía y nos volvimos amigos –mencionó Tania.
–¿Las brujas no tienen un lugar para ellas?
–Tienen un aquelarre pasando el bosque del lado suroeste, han crecido en los últimos años con la ayuda de la Luna.
Madison tenía mucha intriga por conocer a Lily, a todos los lugares a donde iba o a las personas que conocía siempre escuchaba su nombre, pero ella no había aparecido en todo este tiempo en la manada y sin Dylan no podía buscarla.
–¿Quieres ir a algún lugar antes de regresar? –le preguntó Breiner –. Hay una cafetería que vende delici
