Los días siguientes me embriague tanto de su piel que siento que la tengo puesta sobre mí, como si fusemos uno solo, no entiendo que me ha hecho esa mujer, pero ahora se me hace algo difícil sacarla de mi vida, he intentado convencerme que ‘El Averno’ es su lugar, que allí es a donde ella pertenece solo que llegar y verla con una sonrisa recibiéndome, preguntándome como me ha ido y sentir su calor se ha vuelto en una especie de drog* una de la que no deseo ser rehabilitado por ahora.
Estaba tratando de concentrarme en los documentos que tenía delante de mí, no puedo perder le ritmo de los negocios solo por un coño apretado por lo que trato de poner todo de mí, aunque ella está en cada maldito pensamiento, su desnudes, la calidez de sus labios está en todas partes de mi ser.
La puerta sonó y despegue por un momento mis ojos de los papeles, para ver como una de las mucamas entraba y daba una pequeña reverencia para luego indicarme que mi cuñada y sobrina estaban en la casa y requerían de mi presencia, fruncí el ceño, no es muy habitual que ellas vengan aquí, sobre todo Roxana, me levante y baje de inmediato, lo primero que se me vino a la cabeza es que hay un nuevo problema.
- Regina, principessa, benvenuta a casa mia, c'è qualche problema? (Reina, princesa, bienvenidas a mi casa, ¿hay algún problema?) Dije mientras me aproximaba a ellas para dar un pequeño asentimiento a mi cuñada y tomaba con mis manos el rostro de Montserrat y darle un beso en ambas mejillas.
- No tío, no te preocupes, todo marcha de maravilla, de hecho, mi pequeño secuestro nos ayudó a afianzar los negocios con los turcos, lo que nos hace la vid un poco más sencilla en el Medio Oriente.
- Eso me parece perfecto, jamás dudare de la impresionante magia que tienes para conversar a las personas de hacer tu voluntad pequeño diablillo. La tome entre mis brazos, mi sobrina es todo lo que me hace sentir orgullo.
- Bueno teniendo al Demonio Lombardi como tío, debo ser mínimamente la mitad de lo que es él si deseo sr considerada una buena Regina. Me sonrió – Pero, eso no es lo que nos trae aquí, de hecho, creo que ya sabes que luego de lo que paso la búsqueda de mis guardias se ha vuelto una prioridad para el capo y mi madre, por lo que hoy vinimos contigo, se que tienes un excelente ojo para escoger a los guardias, además me he enterado que la persona que consiguió mi ubicación fue una chica, una que tal parece tu conoces, ¿Es una de tus Sabbie Mobili?
Lo que me estaba diciendo me dejo helado, no la parte de sus guardias, era obvio que luego de lo ocurrido desearan adelantar todo para que su seguridad no estuviese expuesta nuevamente, pero eso otro de que saben que fue una mujer la que consiguió su ubicación hizo que apretara mis puños volviendo mis manos blancas mostrando la ira que recorría dentro de mí, ellas no debían saber nada de Jocelyn, de hecho no debían saber nada de mi casa lo que me dejó muy claro que Filiphe tiene razón, alguien esta filtrando la información de mi casa hacia la mansión principal.
- Cálmate cuñado, no es para que te pongas de ese modo. Roxana me miraba de forma burlona, sabe que no me agrada que mi información se filtre menos si llega a sus negras y destructoras manos – Solo deseamos lo mejor para Montse sabes lo que ocurrió la ultima vez y no deseo volver a pasar por ello Mauridcio, además esa chica que consiguió su ubicación demostró ser muy útil, por lo que hacerla parte de la guardia de la futura Regina es más que una buena recompensa.
- No me mal interprete Regina, en realidad, solo me asombra como mis guardias y el servicio tienen la boca tan grande como para divulgar lo que sucede en mi casa. Montserrat puso la mano sobre mi hombro, noto de inmediato que lo que su madre había hecho no me agrada en lo absoluto.
- Tío si te molestamos te ofrecemos una…
- No tu no debes disculparte con nadie hija, solo venimos por tu bienestar por más nada, deseamos saber quien fue la valiente que ayudo en el rescate de mi hija, no buscamos meternos en tus asuntos.
- Pero eso es justo lo que estas haciendo Roxana. Lleve una de mis manos a mi cien, Dios en este momento te ruego que me des mucha paciencia – No tengo problema con darle a mi sobrina el mejor de mis guardias, pero que te pongas a indagar lo que sucede al interior de las paredes de mi casa, no me agrada, no olvides quien soy cuñada. Con los ojos iracundos me señalo con un dedo.
- Y tu no debes olvidar a quien le hablas, no solo soy tu cuñada Mauridcio, soy tu Regina, una que hoy acudió a ti con tu sobrina solo para buscar su seguridad, no viene a pelear, ni tampoco a entrometerme donde no me interesa lo que suceda en tu casa no es asunto mío.
Me reí, no pude evitar hacerlo, están gracioso ver como finge todo el tiempo el que cada uno de los pasos que da hacia mí son con toda la intención de margarme la vida, enserio que no entiendo como puede tener tanto veneno, ni que me la hubiese cog*do a ella y no a su hermana.
- Digame algo Regina ¿Acaso Andreas no es una de sus fieles Sabbie Mobili?
- Por su puesto que lo es, jamás pondría en duda su fidelidad y lealtad hacia mí.
- Entonces usted misma se ha respondido el porque de mi enojo. Voltee hacia mi sobrina – Te ayudare en todo lo que desees, pero olvídense de la chica que me ayudo a ubicarte Montse, ella esta fuera del radar en estos momentos y es mejor mantenerlo de esa forma, en cuando a Andreas, dígale que no me molesta que se meta en la cama de uno de mis guardias, pero que su osadía le ha quitado la vida a un hombre y que si sigue espiándome a próxima en ser estrangulada por mis propias manos será ella.
Si con mi mirada pudiese matarla lo hubiese hecho, el que sea la mujer de mi hermano y la madre de mis sobrinas no le da el derecho de meterse en mis asuntos, yo soy un heredero Angelucci, un pilar de la Famiglia, la sangre de Capos corre por mis venas y no voy a permitir que Roxana se siga tomando atribuciones en cuando a mi intimidad. Ella trato de reviras, pero Montserrat le lanzo una mirada de advertencia, ya era suficiente, me conoce y sabe que tengo poca paciencia y que no debe jugarse conmigo cuando no estoy de humor.
- Si dices que es mejor dejarla fuera del radar ha de ser por mi bien tío, así no insistiré en ella, espero que por lo menos cuando sea prudente puedas presentármele, le quiero agradecer lo que hizo. Se acerco más a mi – EN cuanto a mi guardia quiero que me ayudes, confió en tus elecciones y no te preocupes Andreas no volverá aquí.
- Monserrat que…
- Basta mamá, ya es suficiente, olvidas todo el tiempo que él es Mauridcio Angelucci Di Lombardi, un heredero, la sangre que corre por mis venas corre por las de él no ha hecho más que cuidarnos a papá, a Fiorella y a mi e incluso a ti por lo que te pido que ya dejes esta guerra absurda, lo que paso con la tía Tiff ya no tiene reversa, acéptalo, vive con ello y avanza.