—Te vez espectacular Amy —exclamó Nora al ver a su hija con un vestido color n***o de manga campana con abertura con un hombro de cuello gargantilla. Amelie se miro al espejo, le gustaba lo que veía, este vestido la hacía ver y sentir segura, le daba personalidad. —Sólo faltan los aretes —Manolo se acercó a poner en las orejas unos zafiros que había escogido de la colección de su madre. —Siento que todo esto es demasiado… —dijo ella, quien no estaba acostumbrada a asistir a ese tipo de eventos donde sabía que su presencia era una de las más esperadas ahora que estaba supliendo el puesto de su madre. Nora se acercó y puso las manos en sus hombros mirándola fijamente como cuando era niña. —Jamás algo será suficiente para mi bebé, te ves increíble y serás la mejor vestida de toda la g