Capítulo 2 "No tenias derecho sobre ella"

1819 Words
Lúcian respiró hondo, posó su arma sobre la mesa moviendo su cuello de un lado a otro, Calen tenía los ojos bien abiertos, Lúcian mandó a que le quitaran la cinta de su boca y así lo hicieron. —¡Arg! ¡Lúcian estas loco! —gritó del dolor —¿Qué piensas ganar con esto? —¿Ganar?... Ja… —se dió la vuelta —Yo ya perdí hermano… Calen hizo una mueca con la respiración agitada. —Creí haberte sido muy claro, cuando te advertí qué te alejaras de Kamari… —Lúcian miraba a la nada, sus ojos estaban decaídos y débiles, perdidos tratando de encontrar una razón más de volverlos abrir, con las pocas fuerzas que tenía levantó la mirada directo a su hermano Calen —Pero te atreviste a desobedecerme —hizo una pausa corta —Y seguiste viéndola… A mis espaldas. Calen soltó una carcajada —Ella ya no te amaba Lúcian, o mejor dicho, ella nunca te amó para ser realistas, todos aquí sabemos que ella fue solo una pieza de tu tonto juego a querer unir familias y ella estaba muy consciente que solo era un peon más. —respondió con ironía. —Digamos… Que sólo fui su consuelo. Mael no pudo escuchar más y se dirigió a Calen para abofetearlo —¿Cómo te atreves a hablar de Kamari de esa forma? —le tomó de su cabello y llevó su cabeza hacia atrás para percatarse de que lo mirara a los ojos —Ni siquiera tienes derecho a mencionar su nombre. —la boca de Calen empezó a sangrar, miró Mael a los ojos y se burló soltando en su cara una risa retadora —¿No tengo derecho? —echó su cabeza a un lado para mirar a Lúcian —¿Sabes cuantas noches le di calor? ¿Acaso te contó las veces que se sentía sola y quería hablar con alguien? Las veces que fui a buscarla a media noche para abrazarla… Para escucharla quejarse de ti… de cómo la usabas y pintabas perfectamente el papel del esposo destacado del siglo, ¿Recuerdas de su aborto espontáneo? Pues ella fue quien lo provocó porque prefirió ser estéril antes que tener un hijo de Lúcian Romanio; ¡Asique no me digan que no tengo derecho porque como yo lo veo fui yo quien cubrió tus huecos y limpió tu desastre! Como siempre… Mael negó y le volvió a abofetear —¿Te crees con derecho no? —depositó otro golpe en su rostro —¿Crees que Kamari te hubiera mirado si tu no te le hubieras atravesado en el camino? —Lo volvió a golpear —¡Nunca tuviste derecho a tenerla! Ni siquiera de admirarla. —dejó de golpearlo y el rostro de Calen empezaba a desfigurarse… Mael lo miró con desprecio y le escupió en sus heridas que él mismo provocó —No la merecías no tenias derecho de llevartela… Calen se impulsó hacia delante —Yo no me la llevé, fué ella quien decidió venir conmigo… Aún sabiendo que provocaría la guerra de ambos territorios y la misma ruina de su propia familia decidió venir conmigo —sonrió y miró a Lúcian a los ojos —¿Dime tu si la villana aquí no es la misma Kamari? Lúcian tomó su arma y jalo del gatillo depositando una bala en su pierna. —¡Ah! ¡Idiota me disparates! Lúcian volvió apretar el gatillo y le disparó en la otra pierna —¡Arg! ¿Acaso me quieres matar? Lúcian se acercó a Calen —Todo este tiempo fui bueno contigo por ser mi hermano… Te di el territorio de Yan solo para ti e incluso hice qué te reunieras con las familia Russo y los Fergus, te dí la primera hija de los Spencer, te dí mi mano para que la besaras, te acepté en mi casa y comistes en mi mesa y me traicionaste…. Me quitaste lo único que te pedí no tocar… Kamari era lo único por quien pelearía en este mundo y tú, me la arrebataste —enderezó su postura y apuntó el arma en su frente Calen río —Tú no eres capaz de matar a tu hermano de sangre… —Vaciló —No mientras mamá viva, no le harías eso a ella. "PUM" Mael y Lúcian voltearon para ver de dónde había provenido el impacto y justo detrás de ellas estaba Atarah, sosteniendo un arma de fuego con ambas manos a la altura de su cara, en su rostro había manchas de maquillaje indicando que había llorado después de haberse medio maquillado, la línea de sus labios estaba abierta y las de su frente arrugada. —Yo si. Mael corrió de inmediato y le quitó suavemente el arma, el pulso de Atarah temblaba y dudaba lo que le sorprendió a Mael qué acertara con un tiro casi perfecto, Atarah bajó sus manos y Mael la abrazó lo cual ella lloró Lúcian seguía de pie mirando a su hermano Calen muerto. Atarah miró a Lúcian y se acercó a él entregándole unos documentos envueltos, Lúcian los tomó y los abrió. —Conozco muy bien a mi amiga y se perfectamente que ella jamás miraría a una escoria como Calen —miró con rabia el cuerpo —Ahí están las evidencias de que Calen la extorsionaba a tus espaldas incluso usó la ayuda de uno de tus hombres incluido uno de tus primos, la habían usado para sacar información de tus trabajos y tus reuniones fuera de la ciudad y Calen la Chantajeaba que si no tenia sexo con él te mandaría las evidencias qué había sacado Kamari… Lúcian miró nuevamente el cuerpo para volver a mirar los documentos y las fotos. —Incluso el bebé no era tuyo Lúcian, era de Calen y él la obligó a abortar, su accidente fue provocado por el mismo Calen, querían deshacerse de Kamari porque estaba dispuesta a hablar contigo… Así que escribieron la carta y se la llevaron de la casa a la fuerza antes de que tú llegaras… Al terminar Atarah exhaló tranquila, Mael la abrazó y la besó. Lúcian apretó los documentos y apretó los dientes… Unos momentos después salieron de la finca, Mael había abrigado a Atarah con su abrigo y la montó en su auto primero, Lúcian seguía adentro y Mael entró. —¿A hora que Calen ya no está… qué piensas- —Calen tenía razón… no podía asesinar a mi propio hermano. Mael guardó silencio… Lúcian levantó la mirada y observó toda la casa. —Sin ella ahora todo se siente tan solo… Mael se limitó a solo escuchar y a mirar a su amigo… —Ella fue muy valiente Lúcian… fue tu esposa y mi amiga, —Después de pensarlo soltó una risa —Mi amiga… —sus ojos se cristalizaron —Sin duda fue una buena amiga… —se dio vuelta para ocultarse de su amigo, se dirigió a la cocina y se apoyó en el comedor… Su mente empezó a divagar al recordar los momentos más iconos justo a ella… —Mael, por favor dime que no llevaras ese traje a la fiesta —Kamari cruzó los brazos arqueando la línea de su boca. Mael la miró de arriba a abajo —Obvio que llevaré esto, volveré locos a todas incluso —la señaló con un dedo —A tu amiga Atarah, le mostraré que ninguna chica se me resiste. —tomó un peine y llevó su cabello hacia atrás mirando través de su espejo Kamari soltó una carcajada y Mael la miró confundido —Con este atuendo te confundiran con el payaso de la fiesta. —se acercó a su armario y lo empujó a un lado de la habitación, después de pasar varios minutos buscando salió con un traje azul —Mejor usa este, el azul es la debilidad de Atarah… … Al Recordar, las gotas qué Mael aguantaba salieron sin más… *** En el auto Atarah miraba al vacío, recordaba una y otra vez el disparó hacía Calen, lo que la hacía sentir culpablemente satisfecha, recostó su cabeza en el asiento y cerró los ojos… Kamari… Lo prometiste… pero terminaste dejándome sola, ¿era tan difícil pedir ayuda a tu mejor amiga? Como siempre, terminé descubriendo tu vida por mi cuenta. *** Los hombres en la finca limpiaron el desastres y se llevaron el cuerpo de Calen, todo quedó como nuevo y sin culpa, Lúcian era el único que había quedado en la casa luego de pedirle a todos que se fueran una vez terminar el trabajo Después de pensar un rato en la playa, decidió entrar, se dirigió a su habitación y cerró la puerta con llave y se recostó en ella… cerró los ojos y por primera vez sintió que no tenía que fingir más… Estaba solo, no había cámaras, no habían miradas sobre él, no estaban sus hombres ni nadie que pudiera poner en duda su debilidad… Sus piernas se debilitaron y las soltó, las dejó caer cayendo sentado, y una vez más no pudo contener las lágrimas… esta vez no quiso aguantar más y dejó qué sus emociones salieran… Kamari… —El nombre de su esposa resonaba en su cabeza —Ja, ¿Acaso te contó las veces que se sentía sola? —La voz de su hermano minutos atrás. —Calen extorsionaba a Kamari… —la voz de Atarah. Aquellos recuerdo hicieron qué Lúcian se golpeara la cabeza para callarlos, sus lágrimas no dejaban de salir y el dolor en su pecho no dejaba de ahogarlo… —Lúcian… —la voz de Kamari unas semanas antes mientras ambos dormían bajo una carpa en su patio mirando las estrellas —Si un día despierto y descubro… qué no te amo… ¿Qué harías? —aquella noche sus ojos brillaban como nunca… Hacían juego con las hermosas estrellas qué adornaban él impetuoso cielo, Lúcian se dió la vuelta para mirarla y apreciarla… Ambos quedaron de lado frente a frente, él tocó tiernamente su mentón pasando los dedos sobre sus labios —Volvería al principio, y te mostraría porque debes volver a enamorarte de mí. Kamari se burló —¿Y crees poder lograrlo? Te costó hacerme cambiar de opinión anteriormente. —Por ti soy capaz hasta de volver al tiempo y buscarte de nuevo… incluso si llegases a olvidarme volvería hacer el mismo Lúcian con el que te casastes para que así me recuerdes, si no me amas entonces te mostraría con mi mano lo grande que puede llegar hacer el mundo solo para ti… O incluso si no te gusta entonces convertiría el mundo en una pequeña caja de música con tu música favorita de cuna solo para que cuando te aburras la abras y lo aprecies en todo su diminutivo. Kamari se echó a reír volviéndose para atrás —¿enserio harías todo eso?... ¿Enserio?...
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD