Los jadeos llenos de dolor salían por los labios resecos de Erik, su estado era tan delicado que algunos mencionaban que no valía la pena ayudarlo a sobrevivir más. Pero Klaus sabía que valdría la pena salvarle la vida a aquel hombre, en un par de meses e incluso años podía serle de utilidad y solo por esa razón le había salvado la vida. Isak podía decir que conocía a su mano derecha Klaus, pero en realidad no era así. Isak solo conocía un poco de él y no se daba cuenta de la máscara que portaba Klaus, el cual siempre cumplía con las misiones para ganarse el respecto y la confianza de su gente. Klaus dejaba que las personas confiaran en él, buscaba sus miedos y debilidades para que en el momento perfecto pudiera atacarlos. Klaus a simple vista podía verse inofensivo, pero cuando se propo