El Castigo de Ie

4999 Words
Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.  Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.  Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.  Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.  Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.   Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro de odio ni siquiera con sus peores enemigos fue así.   Todos caminaron hacía donde estaba aquella escoria y cuando llegaron la mirada de Ie quedó en Giotto y no tardó en sacar su pistola y apuntar hacía el chico logrando que los otros lo apuntarán a él, puede que el chico no fuera su cielo pero él se los había encargado y lo protegerían con su vida.   - ¿Quién eres y qué hiciste con mi hijo Yoshi? – le preguntó el mayor sin inmutarse   Giotto quiso reír porque ese idiota ni siquiera lo reconocía. Se acercó al mayor sin temor y de un movimiento rápido le arrebato el arma y lo apunto con ella.   - Que triste que ni siquiera reconozcas a tu hijo o a la escoria que decías tener por hijo – le dijo Giotto con diversión y más al ver como el cuerpo del mayor temblaba – Hola padre, ha pasado tiempo   - ¿Giotto? No, tu estabas muerto – dijo el hombre con temor     - Fue algo que planeo mi hermano, nos cansamos de ser molidos a golpes todo el tiempo así que Yoshi como siempre siendo tan listo consiguió elaborar un plan donde yo supuestamente había muerto pero en realidad me envió aquí junto con Dino y Xanx siendo ellos quien me entrenaron para convertirme en alguien bastante fuerte y para tu desgracia yo también tengo la llama del cielo así que tengo mis propios guardianes. – su mirada se oscureció – Ya no soy ese niño que suplicaba llorando que pararas   - Tu eres débil, siempre lo has sido. Yoshi es quien es más fuerte – le dijo el rubio a la defensiva   - Es fuerte porque lo obligaste a serlo   - Y gracias a eso es el jefe mafioso más fuerte que se haya visto desde primo   - ¡LO CONVERTISTE EN ALGO QUE NUCA QUISO SER! UN ASESINO COMO TÚ. MI HERMANO ES AMABLE Y DE UN GRAN CORAZÓN, NO MERECÍA LA INFANCIA QUE LE DISTE. NO SABES TODO EL SUFRIMEITNO QUE GUARDA EN SU CORAZÓN. ¡POR ESO YOSHI SE FUE, POR TU MALDITA CULPA LO ESTÁN PERSIGUIENDO INCLUSO LO AMENAZARON! POR ESO SE FUE MALDITO DESGRAIADO. ¡MUERETE Y PÚDRETE EN EL INFIERNO PORQUE ES DONDE PERTENCES! – gritó Giotto furioso sorprendiendo una vez más a todos ya que acaba de revelar el porque su amado jefe se había ido.   Ie miraba con sorpresa y miedo a aquel niño que lloraban por su perdón y que lo dejará, ahora podía ver la fiereza en los ojos de aquel que era su hijo.   - Pueden torturarlo – miró a los guardianes – solo déjenlo con vida – les dijo antes de salir con Xanx y Nono dejando a los guardianes siendo al hombre como si fuera una presa.  Después de aclarar todas las cosas y ver que Giotto realmente era el hermano de su cielo ya que cuando quería ser sádico podía serlo y siempre tenía esa sonrisa pura de un ángel pero como su jefe les dijo: ellos también podían ser demonios. Ellos llegaron a la mansión Vongola con el cielo al frente que fue recibido por los sirvientes con una leve reverencia hasta que llegaron a la sala de reuniones donde se encontraba Nono y Xanx junto con su grupo externo.   - ¡Abuelito! – gritó Giotto abrazando al mayor con cariño mientras Nono reía divertido al tener a uno de sus nietos entre sus brazos   - Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vemos. Me alegra verte Gio – le dijo Nono con cariño – Estás demasiado grande, tú y Yoshi nada más no dejan de crecer   Giotto rio ante lo dicho por su abuelo.   - Aún nos queda tiempo para crecer   - Pequeña basura – le saludó Xanx revolviendo su cabello con cariño – Deberías volver a color de tu cabello normal, te queda mejor aunque se que no es de tu agrado   - Cuando Ie sea castigado puede que lo piense pero por el momento prefiero tenerlo así      - Espero que vuelva pronto Yoshi, ya lo extraño – dijo Xanx con una sonrisa que sorprendió a la mayoría ya que el hombre no era conocido por ser amable o sonreír, era todo lo contrario.   - Tenemos que esperarlo y confiar en que volverá más pronto de lo que creemos   - Por cierto Gio ahora que hablaste del idiota, no s está esperando en la sala de al Aldo – le dijo Nono con una sonrisa bastante tenebrosa, algo que sorprendió a Reborn, quien era quien conocía de más tiempo al mayor y jamás lo había escuchado hablar así de alguien o mostrar ese rostro,          
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