Señor Luthor

Protegerte

— Hoooola. ¿Qué haces aquí?

—Ada es mi esposa.

—Já. ¿Cómo está la tía Sofí?

—Estará furiosa cuando escuche que estás en Mainvillage hace semanas sin verla. . . —Comenta Aurora y le da un beso en la frente—¿Hace cuánto estás aquí?

—Prefiero no decir.

Arturo soltó una carcajada y su mujer le dio el plato.

—¿De qué se conocen?

—La mamá de Aury fue íntima amiga de mi mamá. Es la madrina a la que no lleva ni por un café.

—En mi defensa, ella siempre tiene planes alocados, la última vez terminé en un shooting en Tailandia.

Arturo se rió y le hizo una seña a Drake para que cambiaran de silla, Aurora estaba feliz de haberse encontrado al hijo de su madrina, los Luthor podían ser demasiado y con todo lo que había deseado caerles bien, sentía que no encajaba.

—Maaami, podemos hacer las galletas para decorar.

—Se me olvidó, no, hasta mañana, nadie va a poder comerlas y no quiero oír a tus hermanas llorar —explica Serena.

—Mañana al desayuno, ¿te parece? —Serena acepta.—Okay, les voy a decir a los demás.

La hija mayor de Serena salió corriendo y todos continuaron bromeando sobre los niños y su insistencia. Patrick vio a lo lejos a su hermano y su cuñada, abrazándose como un par de adolescentes, para él, era casi increíble que Addison y Drake, se mantuvieran juntos incluso cuando las cosas parecen irse a al infierno, se acompañan y es como si tomaran más fuerza. Ella sonríe con algo que él dice y su hermano le besa, Patrick mira a su lado para reñirse con Mercy, como cada vez que su hermano y su esposa se comportan como novios adolescentes, pero, se encuentra con la chica joven y dulce a su lado que simplemente no es ella.

—Estás bien, ¿quieres que te traiga algo? —Patrick niega con a la cabeza.

—Voy a lavar platos.

—No… pero, se va a quemar Mainvillage, Patrick va a lavar platos —se burla Serena y todos sus hermanos insisten en ir al exterior para ver la noche.

Aurora decidió ayudar a Patrick pero en su camino hacia la cocina, vio varias manitas haciéndole señas. Ella intrigada fue hacia las niñas pequeñas.

Una, Sofí, Jane, Dana y Jana, las niñas le hicieron preguntas más entretenidas que los adultos, por ejemplo:

—¿Cuál es su princesa favorita?

—Aurora, cómo yo.

—¿¡Te llamas como una princesa?!—preguntó sorprendida Jane, y Aurora asintió.

—No me lo creo—comentó una de las pequeñas y su hermana se sentó sobre el regazo de Aurora.

—¿Me puedes hacer una trenza?

—Y a mí dos—saltó Jana.

—Claro.

Patrick terminó de lavar todos los platos y puso café para que todos pudieran tomar el postre, fue al exterior y Aurora. Tampoco en el baño y las áreas comunes. Subió a la sala de televisión y se encontró a sus hijos y sobrinos mayores viendo una película de acción. El joven bajó a la otra habitación de televisión y se encontró a Aurora acostada en medio de las chicas mientras leía un cuento con voz tenue, su hermana estaba espiando también y sonrió hacia él.

—Es una buena muchacha.

—No es ella —reconoció más para sí mismo que para Serena, ella se acercó y le dio un abrazo.

Serena le había notado durante la cena, Patrick había volteo después de espiar a Drake y Adi, lo que pasaba era que no estaba la compañera con la que siempre se besaba mientras silenciosamente daba gracias por el amor.

Serena le dio un abrazo a su hermano y él le rodeo con sus brazos antes de besarle en la frente.

—Papá—los dos le hacen una seña de silencio y Aurora se acerca al grupo de puntillas. Serena le felicita por las trenzas. Las dos sonríen.

—Papá, voy a quédame con los abuelos. Venía solo a despedirme.

Patrick le da un beso y un abrazo a su hija. Ella les avisa que va a pasar por sus cosas y se despide luego de aurora.

Sus hijos mayores también se despiden, y Patrick le propone a Aurora escapar.

—¿No nos vamos a despedir de tu familia?

—Son demasiados.

—Me da vergüenza.

—A mí no.

Patrick la tomó por la cintura y la dirigió fuera de la casa. Ella le siguió entee confundida e intrigada,les había caido can mal a los luthor en tan solo unos minutos. Drake y Karel bloquean con su cuerpo a Patrick.

—Patrick, cómo que te vas tan temprano. No, no, mañana es domingo, ven, aunque sea una copa de vino y el postre que dejaste ahí servido.

Patrick se disculpó con aurora y ella negó con la cabeza. Se sentó sobre un tronco y Jane que se estaba despidiendo de sus hijos, uno a uno, le preguntó desde cuando era tan pegajoso.

—Bye mamá.

—Bye—respondió ella. —Ha sido un placer, espero volver a verte pronto.

Laini se sienta al lado de Aurora y se presenta, las dos parecen llevarse de maravilla, así que Patrick las deja solas para escuchar las opiniones de sus hermanos que están jugando con la fogata para preparar carne para el día siguiente. Mientras, Laini, Serena y Aurora se burlaban de ellos.

—Qué haces los viernes que no es pasarlo con unos hombres de las cavernas, viendo el fuego.

—Dormir, quedo molida. Antes de venir estaba profunda cuando escuché a Patrick.

—Sabes, los Luthor pueden ser demasiado, pero, son familia para toda la vida.—comentó Laini, que había sido mejor amiga de serena toda la vida, novia de Zack la otra gran parte del tiempo y por último la esposa y madre de los hijos de Kyle.

—Sí, somos un poco demasiado y definitivamente nos cuesta dejar ir. Sobre todo a Mercy, mi mamá y Merc eran mejores amigas, era nuestra madrina, y Patrick es su hijo favorito por mucho, así que puede que sea un poco lento con ella y con todos la verdad, pero, mi hermano parece ilusionado, ha encontrado una pareja que quiere presentar a la familia.

—Lo sé, una vida no puede equiparar dos meses.

—Qué lindas las cuñadas, se vienen a sentar como princesas. Serenita, mi amor, ¿te traigo un té o algo?—Le molesta Adison y las dos se ríen.

—Tu marido es el que quiere hacer brisket.

—No puedo con Drake, contigo y Ada.

—Ada ya se fue y me dejó el problema. —ella se pone en pie y le grita a su hermano para verificar juntos la receta.

—Lore es la que sabe —responde y los tres van al interior de la casa.

—Me muero del frío. Voy por mi abrigo.

—Te acompaño —se ofrece la esposa de Kyle y las dos van juntas al auto de Patrick, porque Aurora no le había visto cerrarlo, la joven se va conversando con Laini.

Facundo termina de acomodar el asador y sus cuñados por poco aplauden, él sonríe complacido con la inversión que hizo en un asador casi que bajo tierra.

—¿Cómo haces con los niños? No vayas a tener Far asado —bromea Zack y Facundo no puede evitar reír antes de señalar la plancha de metal para cubrirlo.

—¿Por qué se han ido mamá y papá?—les pregunta a sus hermanos. Ellos le explican de forma burlista que su papá se ve bien, pero no está joven. Patrick rueda los ojos y les deja bromear como siempre. Adrian, le pone una mano en el hombro y lo aparta del grupo.

—Es una niña muy mona, pero, no es tu tipo.

—¿Cuál es mi tipo? —Patrick sabía que tenía un tipo de toda la vida, la primera vez que había tenido una erección había sido viendo una modelo en la televisión y su cerebro lo llevaba muy claro desde entonces, le gustaban las mujeres altas, delgadas y con bustos pequeños, aurora no era nada de eso, y definitivamente podía intentar engañar a sus hermanos pequeños, pero Adrian le conocía demasiado.

Su hermano estaba cansado de sonar como un cabrón, pero, el dinero y el orgullo para él no eran una sola cosa y Patrick de todos sus hermanos era el que menos le había dado importancia a ser el mejor o peor durante en la infancia y adolescencia.

—No tiene edad ni cuerpo para decir que te gusta. ¿Patrick, por qué estás saliendo con esta mujer?

—A mí me cae bien, pero, si es por dinero…—comienza a decir el menor de sus hermanos.

—Patrick, si quieres follar con una mocosa, todo bien, pero yo no me trago que estás saliendo con esta mujer por amor, no se parece en nada a las barbas secas que te gustan, ni siquiera en comportamiento, es lo más sumisa que he visto en la vida. Algo pasa y no quieres decir, el dinero no lo es todo, tú tienes propiedades, una herencia que no has tocado, podemos vender la casa Luthor Betancurt.—Patrick le da un golpe en los labios para que se calle porque ha ignorado todas las señas, Zack se lleva la mano a la boca y se la cubre.

—Perdón, iba a pedirte las llaves para ir por el suéter, pero, solo… ¿Podemos irnos?

Me encanta cuando comentan, sigan haciéndolo que las leo.