– !Hoy el sol se despertó con un rastro de rocío, hoy ha nacido, mi pequeño rayo de luz!
Cuando era pequeña mi madre me cantaba esa canción, era hermosa, mientras crecía su voz hacía eco en mi memoria y la repetía cuando me sentía triste.
La olvidé hace mucho.
Me gustaban las flores, eran lindas, aún lo son, y me gustaba abrir la ventana para sentir el aire fresco de la mañana, después la cerraba y tenía un ataque de tos, pero era divertido.
Mis ojos están hinchados y mi olor es desagradable, mi vestido está arruinado, la sangre oscura que salió de mi cuerpo es el medicamento que tomé durante todos estos años.
Me siento pesada.
Todas las cosas que hice, ordené que le dieran a Aline diez latigazos y la obligue a agradecérmelo, como si lo que hice hubiera sido un acto de bondad, maté a
