—Hacemos a todo los hombres solteros, para que se reúnan en la pista —dijo el DJ, después de haber desocupado el espacio para el nuevo juego entre los invitados varones.
Haarón estaba de espalda a la multitud y arrojó la lila por encima de su cabeza. Se dio vuelta al instante, y vio que el afortunado que la había agarrado era su amigo: Webster Jarvis.
—Ya tenemos un afortunado —dijo el DJ, una vez más—. Es el turno de las señoritas, para que participen.
Honey sostenía el ramo de bodas y las mujeres se ubicaron detrás de ella, para lograr obtenerlo. Hizo un fuerte movimiento con sus brazos y lo arrojó por el aire, en la que resultó triunfante su secretaria ejecutiva: Lila Williams.
Así, pues, los rituales matrimoniales habían terminado. Los invitados continuaron bailando, mientras que
