Aurora pasó cinco días en el hospital, durante esos días la única visita que recibió fue la de su amiga Vicky y la del doctor que le atendía, quien por cierto había sido muy amable con ella. —Aurora ya te vas, tendrás que durar unos días más con el cuello ortopédico pero ya pronto podrás quitártelo— Le dijo el doctor contento por eso. —Muchas gracias doctor, usted fue un ángel para mí en estos días— Le respondió con agradecimiento. —Fue un placer tener a una paciente como tu, te portaste bien— Le respondió. Aurora le sonrió, al menos en esos días se había sentido bastante bien, excepto por los golpes. —Tengo unos días viéndolo pero solo he visto su apellido en su bata— —Mi nombre es Diego Valverde, ha sido un gusto conocerte Aurora— Le respondió mientras le extendía la mano. Aurora