Mientras Christhop corría con Krystine en brazos. La situación en la mansión era tensa Ada estaba preocupada por que no había recibido ninguna noticia de parte de Alexander. Luka se encontraba muy molesto con su hermano por haber invitado a cenar a Krystine y que algo le paso por culpa suya.
Luka recuerda como esa noche entró en su habitación manchada de sangre y con notable preocupación.
-Luka, Krystine fue herida no creo que vuelva a la mansión más- le comento en un susurro y eso fue lo que necesito para estallar.
-¿Cómo la hirieron? No se suponía que el imbécil de Christhop la “cuidaría”- Le grito molesto.
-Unos muchachos del pueblo lo provocaron, uno de ellos la hirió; ya Alexander la saturo y vienen en camino- le explica.
Todo su cuerpo se tenso, sabía lo que podría significar eso en el momento en que mencionó a aquel joven.
-Por lo menos espero que lo haiga matado- es lo último que dice al escuchar a Harry llorar.
Ada se retira sin decirle nada más y va en busca del pequeño.
El sólo pensamiento hace que se enfurezca más porque han pasado cuatro días y no hay rastro de Krystine.
Pasaron las horas y notó que ella no había regresado mando a buscar a la mamá de su hijo para que se lo llevara.
-Veo que ahora sí me regresas a mí hijo, seguro ya acabaste con la enfermerita esa- dice burlándose.
Luka a pesar de estar tomando su medicación, las emociones le estaban afectando y agarró a la mujer zarandeándola por los hombros.
-NO DIGAS ESTUPIDECES Y LARGARTE AHORA MISMO DE MI CASA- le grito furioso, ella retrocedió asustada y salió de hay.
Ada que escuchaba todo se preguntó el porqué de comportamiento de los jóvenes Hoffman con aquella joven, si antes les daba igual si les pasaba algo o no.
Ella sabía que Krystine tenía que regresar con vida porque sino eso se volvería una pesadilla, conocía a Luka él era el más malo, sabía todo lo que había hecho y que no se arrepentía de nada mucho menos estando en un episodio.
Christhop pensaba en que Alexander era un cobarde primero por golpearlo estando el distraído y llevarse a su hermosa flor y segundo por huir como un cobarde. Lo odiaba más porque por culpa suya Krystine estaba nuevamente herida.
El menor de los Hoffman no comprendía porqué quería salvar a Krystine si nadie casi nunca le importaba y la acaba de conocer, pero no pensaba con claridad ya que hacía cinco días sin tomar su medicamento, desde el día de la cena todo estaba perfecto pero esos chicos dañaron su noche y a su flor.
Y mientras corría por un breve momento observo a Krystine su piel estaba pálida, sus labios resecos y sus ojos cerrados eso lo alertó y avanzó con más velocidad