Brooke Pov:
¿¡QUÉ!?
No puedo evitar que mis ojos se abran mucho y mi quijada llegue casi hasta el suelo debido al consejo que me han dado. Sé que Gérard no lo ha dicho en mal, ni mucho menos espera mi reacción tan sorpresiva, pero...
Yo jamás…He entrado a la habitación de Elliot.
Me estremezco con solo pensarlo y no sé si es por el frío que cala mis huesos o por qué de verdad la sola idea de entrar en la habitación de Elliot es aterradora ¿Qué pasa si él se enoja? No quiero invadir su privacidad y mucho menos de esa manera.
—No se preocupe—me anima Gérard, mientras abrazo mi cuerpo y sigo dudosa por su recomendación—Debe quitarse esa ropa mojada y calentar su cuerpo, pues es muy probable que pesque un resfriado si sigue así…
—No lo sé, Gérard—expreso dudosa, sintiéndome algo extraña
