—Basta Annia, déjala, no la golpees, ella no te ha hecho nada
Annia estaba desquiciada golpeando a Sarah, la odiaba, según ella le había quitado al amor de su vida y le contesto gritando
—No debe dejarte en paz, no debe acercarse a ti… tú eres mío… Míoooo
Los amigos de los dos observaban esa forma desquiciada de la que era su amiga por años, no era la misma, parecía una loca perdiendo los estribos
La pobre de Sarah no entendía lo que pasaba, solamente había llegado allí a visitar a su novio, cuando se encontró con Annia que le preguntó a quién buscaba y fue su respuesta el detonante de semejante agresión, que parecía hecha por una loca de atar.
Mientras el pseudo novio trataba de calmar a la loca diciendo
—Cálmate Annia, ella es mi novia, tú no tienes por qué agredirla, tú solo eres mi amiga
Annia enfureció al escucharlo y al borde de las lágrimas le inquirió
— ¿Eso crees que eres para mí? ¿Solo un… amigo? Y todo el tiempo que hemos estado juntos, todo lo que hemos hecho juntos, ¿se va para el carajo?
Arthur estaba extrañado escuchándola decir esas cosas y contesto atribulado
—Annia lo que hemos hecho son cosas de amigos… solamente de amigos
Lo que nadie esperaba era que Annia saque un arma de su pantalón y apuntara a Sarah que estaba muy asustada, peor se puso a temblar cuando vio que Annia le apuntó quitando el seguro al arma gritando
—Arthur si no eres mío… No serás de nadie… pero primero la mato
Se escuchó un disparo, después solo silencio
Debemos tomar conciencia de que una verdadera amistad se basa en la confianza, algo que se aprende desde niños y he aquí el comienzo de esta amistad, comencemos