El sonido de un golpe resonó en toda la sala y fue el que dio fin a aquel forcejeo entre las dos personas presentes, dejando respiraciones irregulares y la ropa del Rey apenas cubriendo su cuerpo, pero eso no le importó cuando al ser soltado instintivamente dio un par de pasos hacia atrás, buscando alejarse del Emperador. Se encogió sobre sí mismo cuando los ojos llenos de molestia del Emperador se posaron en él, el hombre parecía querer quitarle la vida con su mirada, mientras el dorso de sus dedos estaban posados sobre el lugar del golpe. Tae Young no pudo evitar sentirse intimidado porque si bien estuvo buscando alejarlo, su intención nunca fue golpearlo tan fuerte, no cuando incluso la parte interna de su muñeca dolía por el impacto contra la mejilla. Vio al Emperador tensar la mandí