Narra Clara Mi corazón late tan fuerte que me siento mareada. El sudor recorre todo mi cuerpo. El grito se repite, aterradoramente cerca. Me agacho y agarro el teléfono. —Lo siento, me tengo que ir, volveré a llamar pronto. —¿Clara? espera, espera… Cuelgo antes de que Nicole pueda protestar más y guardo el teléfono en mi bolsillo trasero. Doy unos pasos hacia la puerta del dormitorio y presiono mi oreja contra la madera, tratando de escuchar, sintiéndome mal del estómago. ¿Podría estar equivocada? ¿Realmente escuché un grito? Tal vez estoy perdiendo la cabeza y estoy empezando a escuchar cosas. ¿No es eso un síntoma de esquizofrenia? Pero vuelve a suceder. Un grito definido y viene de cerca. Abro la puerta de golpe sin pensar. Estoy en la casa de un gángster. Un asesino de la mafi