Confieso que no tengo Buenas Intensiones

1236 Words
Mi desdén por los humanos es casi comparado por el amor que tengo por la sangre de los jóvenes inexpertos que se deslumbran con algo de brillo y espejos, me encanta la temporada de verano porque es cuando salen al mundo todos esos corderos de dos patas que se acaban de graduar o que deciden celebrar algún cumpleaños en lugares turísticos famosos. Mi nombre es Lestart Corvinus, Provengo de uno de los mas antiguos clanes de vampiros es decir de la realeza vampírica, tengo 1300 años caminado en la tierra, y nací siendo vampiro algo que no es común ya que los vampiros no tenemos descendencia, solo convertimos a otros a través de las mordidas, se puede decir que soy el ultimo Corvinus que nació, así que no se que es sentir dolor o empatía de los humanos, no tengo una historia triste de como me convertí y de como extrañe las cosas de humanos. A través de los siglos he liderado un negocio muy lucrativo creando plasma artificial basada en la sangre humana, lo que quiere decir que a un humano promedio para no matarlo en el acto se debe sacar unos 300ml de sangre, con esto creamos un plasma que se transforma en 3 litros de sangre, claro lo humanos eventualmente mueren pero no lo asocian a nosotros ya que lo hacemos parece problemas de cáncer, o alguna enfermedad hematológica, Los cretinos de la CVL han estado sobre mi pero no han podido culparme directamente, así que los Captiares se mantiene alejados de mi y mis negocios. - EL único que siempre arruina mis planes y laboratorios es ese perro callejero de Lucian y sus perro de la manada Moon Stone, para mi protección he contratado a un antiguo m*****o de la CVL. Un inmortal que cuida mis días de los ataques de mis enemigos, ya que yo no soy un ser de lucha. Mi apariencia sexy y belleza vampírica es el mayor atributo a la hora de atraer las mas hermosas victimas a mi castillo. Esta noche estamos en un gran evento en la discoteca Privilegie, allí están la mas jugosa cantidad de incautos que se pueda desear. El ambiente esta de lo mejor, me instalo en mi reservado que es un salón amplio con muebles vino tinto y negros de terciopelos en forma de semicírculo es muy amplio y cómodo lo suficiente amplio como para que se sienten 10 personas, allí llevaran mis lacayos Vampiros a todos los tributos de esta noche son tanto hombres como mujeres, eso no importa . Te siento algo ansioso esta noche Duncan!.. Duncan es mi guardaespaldas el inmortal que se encarga de mis enemigos, es un hombre de aspecto temible tiene una mandíbula increíblemente cuadrada, ojos pequeños que siempre parecen estar mirando algo que lo hace dudar, normalmente es muy estoico en su comportamiento pero esta noche esta especialmente inquieto, aunque este parado detrás de mi siento que algo sabe que yo no. - Hay otro captiare aquí Lestart - eso no es bueno para el negocio le dijo con tranquilidad fingida, ya que no podemos hacer nada esta noche si hay otro aquí. La fiesta esta en su pleno apogeo, a mi alrededor hay todo tipo de exceso de drogas, alcohol y sexo, sentados a cada lado de mi están una hermosa mujer color ébano con el cabello corto casi rapado con un hermoso cuerpo escultural y un cuello largo y delicioso me besa con locura mientras yo pellizco sus pechos desnudos, al otro lado esta un hermoso coreano de piel tan limpia, delgado pero espalda ancha. tiene una boca deliciosa que le da placer a mi longitud erecta, yo disfrutó cada lamida y con mi mano estimulo su longitud. estoy en la cima del estasis ya he probado de su sangre, cosa me me dieron de buena gana ellos mismos eso es completamente legal si ellos la ofrecen en una copa o recipiente. Mi boca devora uno de los pechos de mi compañera y mi mano estimula el centro húmedo ella, emitiendo deliciosos gemidos que me encanta. Estoy pensando llevarlos al otro sitio cuando mi vista se dirige a la puerta allí entre la multitud viene entrando una diosa hermosa. Hermosa es poco decir es deslumbrante cabellera roja larga y ondulada, piel broceada, senos perfectos, boca sensual las caderas y el trasero bien distribuido, ella toda que invita a pecar a morderla y chupar su sangre, viste pantalones de cuero n***o una camiseta blanca con aberturas que la hacen parecer rota, chaqueta de cuero n***o cadenas y accesorios que la hacían parecer una dominatrix, mi boca y mi m*****o se hicieron agua por las ganas que esa mujer, caminaba de manera segura y firma hacia donde yo estoy, quiero que me ate y me haga todas las diabluras que pase por su cabeza. se detuvo frente a mi pero su mirada pasaba de mi hasta Duncan. - Soy Emili O'Donnell, de clan inmortal y estoy aquí para saber si vienes en busca de enfrentamiento o tienes otra intensión- Mis manos dejaron de hacer lo que estaban haciendo y le indique a mis compañeros que se alejaran mientras miraba el encuentro - Mi nombre es Duncan McKinsey mi intensión es ser guardaespaldas nada mas- respondió Duncan con una actitud mucho mas seria de la que siempre tiene, mientras las chica sostenía algo en su chaqueta. Confieso que mis intensiones no son buenas en este momento le dijo de forma juguetona a la diosa parada frente a mi, ella apenas baja la mirada y con desprecio responde. ni en tus sueños chupasangre. Fue en ese momento que me di cuenta de que ella es una Captiare, aunque parece loco o poco inteligente eso no me bajo para nada las ganas o la erección que por ella estaba teniendo. Me levanto con tranquilidad caminando hacia ella la rodeo y le dijo muy cerca de su oído ¿ Por que? ¿ Acaso tienes miedo de tomar una copa con un chupasangre ?. Ella volteo rápidamente quedando nuestros labios lo suficientemente cerca y me respondió, no seria bueno para ti que yo tuviera miedo, tengo tantas ganas de probarla que es angustiante, siempre me he mantenido alejado de los Captiare por motivos de seguridad. Pero con esta mujer me pasa algo extraño no quiero que se aleje de mi. Entonces no debería ser problemas tomar un par de tragos conmigo, - No lo creo además según veo ya tienes suficiente compañía. - O por favor eso no se compara con la distinguida presencia de una captiare tan famosa como tu. Podía oler y sentir su aliente tibio, sus ojos verdes esmeralda me miraban ahora con mas curiosidad, ya no era ojos de desprecio como antes. Ella retrocedió un poco y pregunto - ¿ Tu sabes quien soy?- - Por su puesto que se quien eres, he escuchado muchas historias sobre ti-. - Entonces yo estoy en desventaja porque yo no se quien eres-. - Me disculpo por mi malos modales soy Lestart Corvinus es un placer dije mientras levantaba su mano para darle un besos en los nudillos, ella retiro bruscamente su mano pero no endureció su rostro. Se dio la vuelta para irse de la habitación, mientras yo me quedaba perdido en el vaivén de sus caderas. Querida Emili no me importa ya si pierdo la cabeza pero tengo que probar tus sexys labios, eso te lo prometo!

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