ÉTER El infierno está preparado para arder pero jamás para verse destruido. El espectro nocturno no ha nacido pero sí el brillo de la esfera que revelará su llegada en el olvido, destrucción y extinción promete el Dios de la muerte. Con el brillo en su mirada exclama traición. Con el brillo en su mirada promete dolor. Con el brillo en su mirada promete agonía. Y la reina caerá ante su clan desunido. Miles de vidas que arderán con los peones hervidos en arrepentimiento al conseguir el precio de su error. Un enemigo blindado retumbará con el contrataque y sólo cuando la luna roja brille terminará el último ocaso. El cazador será cazado, el ejecutor no cumplirá su misión, un miedo agonizado y para el más temido se asegura su fracaso. La profecía hablaba de un espectro