Es un masoquista

1695 Words
Pov Aidan Mi padre se queda ahí viendo a la nada un rato, parece que lo que dice si le afecta, no sé qué tanto haya pasado, pero viendo su actuar tan sombrío, si es un hecho que es algo que le ha afectado, soy joven, pero entiendo el punto de las emociones en otras personas. Soy bastante observador y hasta cierto punto bueno leyendo a las personas, rasgó que creo que saque de este hombre que ahora no sabe como abordar esta conversación. — ¿Me quieres hablar de sexo, papá?— le pregunto para ayudarle, sé que no es así, él me ve, sonríe y niega, sabía que no era así, pero creí que ocupa un empujón— ya me extrañaba si esa conversación la tuvimos hace un año. — No soy despistado como para no recordar que ya hablamos de eso cuando me contaste que tuviste tu primera erección Aidan— si yo le conté a mi papá cuando eso pasó, a este hombre yo le tengo mucha confianza, nunca me ha juzgado, siempre me escucha y me da el mejor consejo que cree poder darme y justamente ese día me explico todo muy claro, cero cigüeñas, ni abejitas, nada de eso, me dijo todo como es. Mi padre se da media vuelta y se vuelve a sentar un poco más relajado— de lo que te quiero hablar es de otras cosas, tiene que ver con el sexo, si es un hecho que sí, pero realmente es sobre responsabilidad afectiva, sexualidad y principalmente de mi pasado para que aprendas a no ser como yo fui— me dice seriamente y eso me asombra. Si yo quiero ser como él— desde que me entere de que venían a este mundo, mi miedo más grande ha sido fallarles como padre y principalmente que sean como yo más tu hijo. Temo que el Karma me escupa en la cara y me patee en las bolas, viéndote cometer mis mismos errores— eso si me asombra como es que no quiere que sea como él, eso sería un honor— no me veas así, estoy hablando en serio, ¿puedo hacerte una pregunta? Es personal— asiento claro que puede mi padre, me puede preguntar lo que quiera, no me molesta— ¿ya tuviste sexo?— ¿Qué es esa pregunta?— mira, Aidan sé que es algo muy privado, pero creo que para abordar el tema que quiero abordar ahora, debo saber eso. — No papá, no he tenido sexo— le digo con total franqueza, veo alivio en su rostro, ¿qué vio cuando vi a esa chica? Me quedo pensando un segundo y recuerdo que vi su cuerpo con ganas de poseerlo, que ella sí me antoja, ¿en serio él pudo leer eso en mí?— papá, creíste que yo ando teniendo sexo por ahí y deseando cogerme a la que se me presenta en frente— él sonríe algo apenado. Parece que si pensó eso— aún no he querido entrar en eso, no por qué no pueda, sabes que si puedo— mi padre asiente— o por qué no tenga posibilidades, han salido varias, solo que aún no quiero, es extraño, pero creo que aún no quiero. — Entiendo Aidan, supongo que aún estoy a tiempo, pensé que aún tenía tiempo, pero opino que no tanto, por un momento hoy creí que ya era tarde para esta conversación, pero por lo que vi hoy supongo que si saliste a mí y mi familia más que a tu madre y en necesario que hablemos de esto ya— yo me rio como si mi apariencia no le dijera eso ya— no te rías en serio que lo que digo es serio, yo empecé a tener sexo muy joven hijo y por circunstancias que no me enorgullece me volví un promiscuo de lo peor y no quiero eso para ti, tome el sexo como una escapatoria a la presión que sentía en mí y para distracción de lo que vivía y pensaba a diario y no es eso créeme. No hay nada mejor que estar con quien realmente amas y eso no es con cualquiera. Si el sexo es rico, para que negarlo, pero aprendí que es mejor ser responsable y no dejarte caer con cualquiera por juego o placer, es más que eso, hijo, eso es una conexión que se disfruta más con quien amas realmente. No te digo que te esperes hasta casarte o que te cases joven como yo, no todos tenemos la suerte de conocer al amor de tu vida a los 14 años como yo— ahí me perdí otra vez, según entiendo mis padres se casaron a los 17 y tenían unos meses de novios. Las cuentas no me dan— ya te diste cuenta de mi error cierto— creo que sí y no al mismo tiempo— yo empecé a tener sexo a los 13 años, hijo y conocí a tu madre a los 14, pero por una situación que sucedió con tu tío Caleb, resulta que me aleje de ella por tres años estando enamorado de ella. Todo por miedo a meterme en un compromiso y seguí follando con muchas— mi padre arruga la cara y entiendo era imposible que se cogiera a más de 100 en un año— conocí a mi hermosa Bree y por olvidarme de ella seguí en eso. Nunca le mentí a nadie, les era muy sincero, no quería nada con ellas, no fuera de sexo, pero si seguí y fui viendo como mi mala fama me perseguía, al punto que tu madre me veía como un puto cabrón que se cogía a todas. Hasta que cuando intente acercarme a ella y conquistarla, ella pensó que solo eso buscaba de ella, tuve mil problemas por mi pasado promiscuo, muchas chicas intentaron cosas de cosas por separarnos, pensando que yo seguía siendo el mismo. Nunca le fui ni le seré infiel a tu madre, la amo, pero si me arrepiento de que ella no fuera la única mujer en mi vida, ahora lo entiendo, y disculpa que sea así de franco, pero sabes que soy así— asiento y le hago señas de que prosiga. Eso no me molesta— pero cuando al fin me case con ella y logre estar con ella físicamente, deseaba que ella fuera la única mujer que haya tocado mi piel y no fue así, había una larga lista antes de ella, créeme que no quieres eso, vi como viste a esa chica y fue con deseo, eso está despertando en ti hijo y me preocupa. — No te voy a negar que ella le interesa y si me ha pasado la idea de hacerlo con ella, está muy bien papá— mi padre sonríe y asiente entendiendo, hablamos claro para que engañarnos— pero por eso no le hablo, tengo apenas 11 años no voy a correr, no por ahora. — Al menos eres más maduro que yo y eso me tranquiliza Aidan— sonrió ya entiendo su punto, tuvo una muy mala reputación por andar cogiendo con una y otra sin compromiso, eso hizo seguro que mamá pensara muy mal de él, eso no es bueno, una mala reputación no funciona nunca— sé que ustedes tienen una desventaja al estar tan expuestos a mujeres y hombres que andan en eso, al ser mayores que ustedes, eso no me paso a mí, ya que pude disimular que era inteligente por muchos años y ustedes no, pero quiero que pienses bien las cosas y toma en cuenta que esas acciones siempre traen consecuencias, debes ser cuidadoso, no juegues con los sentimientos de nadie y ten en cuenta que al final por más que intentes ocultar todo el Karma te pega en la cara sin compasión cuando haces cosas que no son correctas, no puedes nunca asegurar que alguna chica por más que le digas que no quieres más que sexo se enamore o se obsesione— eso último lo dice haciendo una cara de terror— de eso no te hablaré, pero créeme la pegue muy caro casi muero por eso, créeme Aidan no quieres eso para tu vida. Fin de Flashback Recuerdo esa conversación de ese día con mi padre, entendí que eso de no importa lo que los demás digan, no importa es verdad, pero tiene límites y que no quiero una mala reputación, no debo jugar con los sentimientos de nadie, regla clave y así lo hago. Tuve sexo un año después de eso, pero no fue con esa chica que resulto llamarse Fiorella Alberti, la hermana del idiota de Lucca Alberti, el que se propasó con mi hermana, qué pequeño es este mundo, y que mal lo descubrí, porque nunca la investigue error mío. Debí hacerlo, antes de hacer lo que hice, ya que tres meses después, cuando la mano del idiota de Lucca se recuperó y luego de haber logrado hablar con ella y haber logrado adelantar algo, sí la bese y le pedí una cita, que ella aceptó y luego se fue a la mierda. Puesto que ese mismo día le rompí la boca, le quebré la nariz y una pierna al hermano mayor de ella, si resulto ser hermana menor de Lucca, alias el idiota y desde ahí me odia como nadie lo ha hecho nunca. Pero que puedo decir no podía dejar que eso quedara así. Les pagué una buena suma de dinero a sus padres por daños físicos a su hijo y no me arrepiento de haberlo hecho que puedo decir, desde ahí nadie intenta tocar a mi hermana y si antes me tenían miedo ahora me tienen pánico. Lucca se dio cuenta de que con unos cuantos golpes certeros puedo quebrar muchos huesos y causar mucho dolor más que mi hermana. Pero eso tampoco ha logrado parar, al idiota que sigue insistente detrás de mi hermana, es masoquista y yo el tonto que sigue suspirando cada vez que ve a Fiorella sin esperanzas de que me vuelva a besar o algo más después de haber hecho eso.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD