Los Hermanos Vongola

Ataque

Tsuna

Al abrir mis ojos me encontré con el techo de mi habitación, lo último fue confesarme a Reborn. Mire a mi costado encontrado a Reborn dormido sobre mi cama, al parecer estuvo cuidándome todo este tiempo.

Acerque a mi mano quitando su fedora para acariciar con cariño su cabello.

En ese momento mi asesino abrió los ojos viéndome con ternura.

- ¿Cómo te sientes? - me preguntó sentándose a mi lado

- Mucho mejor, gracias por curarme - le agradecí

- Me alegro, me diste un gran susto pero supongo que valió la pena - me dijo esbozando una sonrisa

- Así es - le dije acariciando su mejilla con cariño

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Ambos se observaban con cariño, sus rostros se comenzaron a juntar, sus labios estaban por tocar se cuando la puerta de la habitación fue abierta.

- ¡Yoshi! - le llamó Xanxus pero paró en seco al ver a los tortolos

- Xanxus - le dijo Reborn molesto

- ¿Qué ocurre? - le preguntó Tsuna

- Después arreglare las cosas contigo Arcobaleno, Yoshi hemos encontrado la sede principal - le dijo serio

En ese momento Tsuna se puso serio para después levantarse y comenzarse a vestir.

- Xanxus reúne a todos - le ordenó

Xanxus asintió para después irse.

Reborn sólo observaba como el castaño se vestía, no se había fijado el día anterior pero pudo observar con atención las cicatrices que cubrían el torso y espalda del castaño, apretó los puños de manera inconsciente.

- Vamos Reborn, por fin me vengarse de ese maldito - le dijo Tsuna ya vestido sacándolo de su ensoñación

- Esta bien - le dijo para después besar la frente del castaño, provocándole un pequeño sonrojo haciendo sonreír al hitman

Ambos salieron a la sala de reuniones donde ya todos se encontraban ahí incluso Giotto y sus guardianes, Haru se encontraba ahí aunque no formará parte de la mafia.

- Ahora que hemos localizado la sede principal quiero acabar con esto lo más posible así que atacaremos esta misma tarde, habrá varias equipos, Varia atacará de frente siendo la distracción mientras que los Arcobalenos entrarán por detrás rescatando a todos los niños o inocentes que encuentren, mis guardianes los ayudarán con el ataque, yo buscare a jefe y lo acabar con mis propias manos, quiero que nadie parte de esa famiglia quede vivo, ahora prepárense nos vamos en diez minutos - les dijo Tsuna serio

Todos asintieron para irse a prepara todo, Tsuna sonrió tranquilo.

- Al fin podré acabar con esta pesadilla – dijo

Reborn se acerco a él hasta estar parado a su lado.

- ¿Lo matarás? - le preguntó

- Así es y Reborn tu iras junto a los Arcobalenos, te necesito para que coordines el rescate - le dijo

- Lo haré pero cuídate a veces cuando enfrentamos a nuestras pesadilla los recuerdos nos invaden y nos permiten avanzar - le dijo Reborn abrazándolo por la espalda

- Tranquilo, mi pasado puede ser doloroso pero necesito cerrar este ciclo y es algo que debo hacer con mis propias manos y prometo regresar - le dijo Tsuna volteándose acariciando la mejilla del azabache

- Estaré esperando después de acabar con esa famiglia - le dijo Reborn

Los Vongola se movió a la sede del enemigo, tal y como dijo Tsuna Varia junto con sus guardianes comenzaron el ataque mientras los Arcobalenos comenzaron a rescatar a los inocentes que la mayoría eran niños y adolescentes.

Tsuna caminaba por los pasillos con la mirada sería, si alguien se cruzaba en su camino lo mataba sin piedad, llegó a una habitación al fondo la cual el castaño recordaba a la perfección.

Al abrir la puerta se encontró cara a cara de su peor pesadilla y la razón de la triste infancia que tuvo, una hombre de cabello azul grisáceo de ojos dorados con un parche en su ojos, al verlo el hombre sonrió.

- Ha pasado tiempo mi hermoso conejito - le dijo

- Oliver - le dijo con furia el castaño

- Mi querido conejito acuérdate de lo bien que la pasábamos - le dijo Oliver acercándose a él

- Cállate - le dijo mirándolo con furia

- Cuando te quite tu virginidad y gritaba y sollozabas era hermoso, cuando tu hermano...

Antes de que pudiera continuar Tsuna lo golpeó activando sus llamas, Tsuna repartía golpes sin dudarlo y lo sorprenderte es que Oliver se dejaba hacer, Tsuna lo sacó de la cede justo donde se encontraba a al verlo se quisieron acercar pero la mirada de Tsuna los aterrorizo.

- Se que bloqueaste tus recuerdos conejito - le dijo con dificultad Oliver

Tsuna se acerco a él, en sus manos apareció una guadaña cubierta de llamas oscuras.

- Hazlo, mátame después de todo ya te rompí - le dijo Oliver con una sonrisa

Tsuna enterró la guadaña en el pecho de Oliver justo después las llamas lo consumieron.

En cuanto el cuerpo se volvió ceniza, Tsuna soltó un grito desgarrador para después caer al suelo desmayado.

- ¡Tsuna! - grito Reborn para acercarse al menor y tomarlo en brazos

Todos estaban en shock, Tsuna nunca los había dejado ver como asesinaban a alguien pero ahora acababan de verlo matar de manera despiadada a un hombre pero aun así era su cielo y lo había dicho para que otros no sufrieran lo que el sufrió.