Dante había llegado a casa de Alondra por la tarde el estaba conversando con ella,pero noto que ella estaba muy pensativa y le pregunto.
-Te encuentras bien te noto rara,estás muy pensativa.
-Disculpame es que hoy estoy un poco cansada pero perdón y dime cómo te fue con tu padre sigue igual de malvado no te ha dado respiros últimamente deberíamos ir a por unos postres que t parece.
Dante se emociono y la tomo de la mano para ir al lugar donde hacen los mejores postres.
Ellos estuvieron juntos por un rato después d comer hasta que la llevo a su casa y el se fue a descansar a la suya.
Al día siguiente alondra como de costumbre fue a visitar a una anciana que era muy amable con ella, la señora Harrison era una mujer viuda que tenía una bella casa muy grande ella heredó de su esposo dinero para una buena vida sin limitaciones tenía un hijo que al casarse se mudó del pueblo y se acento en otra ciudad por negocios así que la sra. Harrison estaba sola la mayor parte del tiempo amaba cuando alondra la visitaba le gustaba ayudarla en hacer sus compras al mercado, platicar con ella,la anciana le enseñaba de modales a alondra ya que siempre le decía que ella estaba destinada a algo grande,alondra no entendía a qué se refería pero le gustaba aprender cosas con ella.
- Sra. Harrison quiero contarle algo, ayer conocí a un muchacho la verdad es que me sentí muy extraña, sentí algo raro al estar con el como si mi estómago diera un vuelto.
la mujer la vio con una sonrisa y le contesto.
Niña mía creo que te haz enamorado, el corazón no piensa solo elije sin meditación.
Alondra no creía eso ya que siquiera sabía su nombre.
-No no lo creo siquiera me dijo su nombre ni de dónde es nunca lo había visto por aquí.
después de un rato Alondra salió rumbo a su casa iba pensando en aquel joven y derrepente escucho que alguien la llamaba al voltear sintió su corazón latir más fuerte era el joven con el que había chocado días antes.
-Srita Alondra como se encuentra.
- Bien joven pero sabe creo que esto es algo injusto.
Alejandro no comprendía a qué se refería y pregunto
-Por que lo dice que le parece injusto.
-Pues es que no sé tú nombre nunca te había visto por aquí eres de aquí?
Alejandro sonrio y le contesto
Mi nombre es Alejandro spencer.
tuvo que inventar un apellido ya que si lo decía se enterarían de quién era realmente Alejandro era el hijo del rey Anthony Bermón el nombre de Alejandro era Alejandro Bermón, el escapaba en ocasiones del castillo el quería saber cómo estaba su gente el pueblo su padre lo tenía ocupado con obligaciones todo el día así que el escapaba para respirar.
-tenia la esperanza de volver a verla alondra es usted una señorita muy hermosa.
Alondra sintió un calor por todo su cuerpo nadie nunca le había dicho que era hermosa así que lo único que se le ocurrió fue cambiar el tema.
-Y dígame Alejandro de dónde eres nunca te había visto por aquí.
Alejandro le invento que venía a quedarse con un familiar ya que quería comenzar a invertir en un pequeño negocio que tenía un tío de el.
así sin más comenzaron a caminar hasta llegar a una pequeña repostería a la que le gustaba ir.
- Alejandro ahora vas a probar los mejores postres aquí sirven una tarta que es deliciosa.
-pues entonces vamos a probarla alondra.
Los jóvenes pidieron y les llevaron té y tartas alondra sonríe al ver la cara de Alejandro al probar los postres el parecía disfrutar enorme mente las delicias que les habían servido, a pesar de tener los mejores cocineros nunca había probado una tarta tan deliciosa.

Alejandro