Alondra estaba muy nerviosa Alejandro le había pedido no hablar con su padre, el quería afrontar esa situación solo, no quería que ella sufriera si su padre se molestaba, aunque Alondra sabía que su padre tenía un buen corazón sabía que no sería fácil para Alejandro, pero pensó que estaba bien. -Esta bien no haré nada, dejaré que ese cabezota lidie con mi padre, espero que no lo mate al verlo no quiero quedarme viuda sin siquiera haberme casado. Y comenzó a reírse, se sentía nerviosa pero era muy gracioso pensar que el Rey todopoderoso vendría a su casa con cierto miedo. Alejandro por otra parte ya había preparado todo para la salida del castillo de su padre, la mansión que el tendría a su disposición era grande, y nada le faltaría, pero Alejandro no quería volver a tenerlo cerca, Hacia