—¿Por qué nunca me lo dijiste, Elon? ¡Tanto tiempo y lo callaste!
—Lo sé… pero no confiaba en ti, eras tan egoísta, tan lejano, nunca pensé… ¡Ayúdame! Phoenix, si no entregó a Miry y A atina a ese hombre, él matará a mi hija, ¡No sé qué hacer! ¡estoy desesperado, al borde de la locura!
Phoenix se quedó perplejo ante sus palabras, podía entender su desesperación, ¿Cuántas veces el mismo no estuvo en las manos de ese criminal?
—Elon… ¿Comprende lo que me pides? ¡Esto debiste hacerlo antes!
—Sí, ¡Lo sé! Tal vez debí, pero… Phoenix ya no puedo retroceder el tiempo, solo quiero una cosa en la vida, recuperar a mi hija, me la quitaron desde que nació, por favor, ¡Ayúdame!
Phoenix guardó silencio por un minuto.
—Está bien, te ayudaré.
Los ojos de Dayne se abrieron enormes, no podía cree
