Aarón. Todo estaba listo, éramos quince agentes, todos vestíamos de fiesta, cada uno de nosotros llevaba vestimenta para salir, trajes, vestidos de coctel, las mujeres iban con prendas demasiados reveladoras, todas ellas llevaban escotes o tajos en las piernas, sus acompañantes, otros compañeros, trajes de etiqueta. — Tengo una duda – Dylan las miro - ¿Dónde guardan el arma? – las chicas sonrieron. Yo me preguntaba lo mismo, sabía donde tenía yo mis armas, dentro de mi saco, justo debajo de mi axila, tenía otra en mi tobillo y en mi espalda, estaba todo acomodado para tener un rápido acceso, las mujeres iban más expuestas, no solo por su piel, según los vestidos que llevaban eran los lugares que tenían disponibles, lo que se resumía a su pierna y bolso. — Usa la imaginación Dylan –