Los días pasan y la tensión s****l con Aidan se vuelve cada vez más grande, ambos tratamos de disimularlo frente a Renzo o cualquier otro, aunque la verdad creo que somos bastante obvios, basta con pasar a su lado para que el roce mi cuerpo con sus dedos o se coloque detrás de mí y comience a respirar cerca de mi oído, algunos coqueteos sutiles y otros que no lo son tantos están haciendo que esté llama se alimente. Desde que llegué aquí hace algunas semanas Aidan no se ha visto con nadie, lo cual me indica que en este momento sus ojos únicamente están sobre mí. Aún puedo recordar el día que lo invite indirectamente a mi habitación y de no ser por Renzo ambos nos habríamos entregado a este deseo que nos está consumiendo. . Flashback . Entro a mi habitación, pero como dije antes, no ci