Ley Prohibida

Capítulo 5

El padre Lucas camino hasta la puerta y vio a las dos mujeres que estaban frente a él, miro a Gimena y no pudo evitar sonreír.

-Es feo escuchar tras la puerta señora intendenta. -La mira.

- ¿Paso algo? -No entendía nada.

-Nada, déjelo así. -Entro a la habitación y se sentó al lado de la chica. - ¿Estas más tranquila? -La joven asintió. -Bien, ¿Quieres contarme?

La muchacha miro a Gracia y dudo por un minuto.

-Estuve mal en haberlo acusado al padre. -Agacho la cabeza y Gracia suspiro de alivio.

Gimena tenía sus dudas, no creía en lo que decía, tenía una certeza de que Gracia tenía algo que ver, las dos se miraron por un segundo y luego volvió su vista a la chica.

- ¿Nadie te mando a hacerlo?

La joven negó con la cabeza y Gimena se cruzó de brazos.

-Está bien, si quiere puede irse, pero tienes que presentarte a la audiencia la semana próxima. -La chica asintió.

La chica se levantó de la silla y Gracia la siguió.

-Qué bueno que no dijiste nada, se nota que eres demasiado inteligente. -Enojada.

-Déjeme tranquila. -Intenta escapar, pero ella la agarra del brazo.

-Si me llego a enterar de que le dijiste otra cosa más, no la cuentas. -La suelta y se va de la iglesia.

Gimena se quedó sola con Lucas y seguía dudando con lo que había pasado, él se dio cuenta de que estaba rara.

- ¿Qué le sucede? -Pregunto y ella lo mira.

- ¿Qué te parece Gracia? ¿Te cae bien?

- ¿Por qué esa pregunta?

-Nada, solo que me parece muy rara. -Seria, se miran a los ojos. -Será mejor que me vaya.

- ¿Por qué te vas? -Pregunto. -No te vayas.

Siente como se pone colorado y estaba sorprendido por haberle pedido de que se quede, ella se pone nerviosa, como lo estaba el.

-No quiero molestarlo padre. -Tímida.

Hubo un clima de silencio, se sentían extraños, tenían la misma sensación de hormigueo en su estómago.

-No me molesta, para nada. -Sonríe.

-Vi que pasado mañana harán una feria y una fiesta de caridad.

-Si, yo voy a estar participando... ¿Ira con alguien a la fiesta? -La mira.

-Si, alguien me invito a la fiesta. -Incomoda.

-Oh...-Entristeció. - ¿Con quién iras?

-Se llama Fernando y creo que es comisario.

La cara de Lucas cambio y se sentía molesto.

- ¿Con Fernando? -Puso mala cara. - ¿Por qué aceptaste?

Ella abrió los ojos como platos, no podía creer que había reaccionado así.

-Yo no quería salir con él, pero tuve que aceptar, quería sacármelo de encima.

-No es un buen hombre. -Serio.

-No te preocupes, solo lo hago para que no me moleste, me tengo que ir ahora, cuídate. -Se va.

Lucas se queda pensativo por todo lo que estaba pasando, nunca estuvo así en su vida, tan nervioso al ver una mujer.

- ¿Por qué le pedí explicaciones? -Pensando.

Sintió un cosquilleo al recordar a la mujer, la noche en que la conoció, tan hermosa y molesta con él por lo que había pasado, su risa, su sonrisa, no entendía esos sentimientos por ella.

-No puedo estar pensando así. -Nervioso. -Debo estar confundido por lo bella que es, pero sé que mi vida está en la iglesia y no puedo caer en tentaciones. -Pensó.

Sus pensamientos le comían la cabeza y la reacción que había tenido al enterarse que iba a la fiesta con Fernando.

-No es un buen hombre para ella. -Hablo. -Ese comisario corrupto y encima la está molestando, tendré que observarlo y cuidar a Gimena de él, la verdad es que la quiero mucho y no quiero que le haga daño, la verdad...

Gimena subió al taxi para irse a su casa y también estaba metida en sus pensamientos.

-Es un cura tonto, ¿Acaso estas locas? Es algo obvio que estas loca Gimena. -Retándose.

Puso su mano en su frente.

- ¿Por qué acepte la propuesta de ese hombre? Sino quiero salir con él, me cae tan mal ese policía y esa mujer me da una malaespina, yo sé que tiene algo que ver con la acusación, lo mira mucho al padre yes algo obvio que lo quiere. -Enojada. -Ay deja de pensar en eso, si no tegusta el cura, solo tienes que resolver su situación la semana que viene y mevoy de la ciudad... pero no quiero irme.