Seguridad no demora en subir, Brenda ingresa a su oficina, se sienta en su silla y ve nuevamente el contrato de los concesionarios sobre su escritorio, lo toma, se hace la que lo lee y lo pone en el corta papeles. —¿Qué parte de no voy a hacer negocios con ustedes no te quedó clara, pensaste que trayendo a tu padre iba a cambiar de opinión? —Tenemos que hablarlo Brenda, con tu padre tenemos un trato, como buenos amigos, siempre nos ayudamos, el nos ayuda con los comerciales y obtiene grandes beneficios al comprar los carros al precio que llegan, el descuento es bastante grande. —Interesante el acuerdo, pero a mi no me interesan sus carros, con la herencia que recibí de mis abuelos, tengo suficiente para comprar el carro que se me antoje. —Pero de que herencia hablas si tus abuelos muri