Capítulo 25
Las Obras de Teatro Navideñas eran un matiné previsto para las dos de la tarde, con una cena de espagueti inmediatamente después. Luego de un almuerzo incómodo que pasé evitando la mirada perceptiva de Adam, me retiré a mi habitación para elegir qué ponerme. Por lo general, en los eventos escolares como este, los padres se vestían muy bien, como lo harían para ir a la iglesia, pero todo lo que tenía era ropa diaria desaliñada, lo equivalente a una semana de ‘atuendos de maestra’, y el pequeño vestido n***o que había comprado para apaciguar a Gregory. Si bien nada especial, el vestido n***o era demasiado subido de tono, mientras que mis ‘atuendos de maestra’ eran demasiado casuales.
Pippa llamó a la puerta. Sabía que era ella porque siempre golpeaba en un patrón cantarín diver
