Suni Me recuesto en mi cama y cierro los ojos. Dejo salir lentamente la respiración mientras trato de sacar de mi mente la forma en que Jonathan se movía en mi interior al mantenerme presionada contra la pared, arrancándome gemidos de placer que no podía evitar. Probablemente todo el piso se había enterado, cosa que en realidad no me importaba, pues lo había disfrutado tanto, al punto de no arrepentirme de nada. Muerdo mis labios y bajo mis manos para acariciar mi vientre descubierto, el solo pensar en lo que fui capaz de hacer en mi oficina me provocaba escalofríos, a la vez que el deseo de repetir aquello que me había hecho sentir mujer otra vez, despierta en mí con gran rapidez. Llevaba cuatro años sin tener sexo, jamás me había detenido a pensar en si me hacía falta o no, hasta h