Vilen El dueño de Russian Pub es amigo de la tía Betha y se desborda en atenciones con todos los integrantes de la banda. Son las veintitrés, la comida está siendo llevada a la camioneta por unos empleados y acabo de dar el tarjetazo a nombre de Dima. Me tienen el celular lleno de insultos por mensaje y el regaño va cuando pise ese cuarto de la clínica. —Les añadí unos postres que amarán y botellas de vino —ha dicho amablemente Filat y se pasó la mano por su cabello rubio. —Eres muy amable, aunque no me salvo de la golpiza por hacerlos esperar —dije burlón y moví las cejas. —No te veo temeroso —apuntó con su dedo arriba abajo mi cuerpo—, en cambio, los vi sonreír a gusto. —El metiche me ha estado espiando. —Verdaderamente, sería un idiota si no apreciaba esas sonrisas escasas —pasé