Maika Es imposible conseguir el sueño, me he movido por toda la cama y en este instante me encuentro boca abajo. Frustrada di con mis piernas cantazos en la cama y resoplé en la almohada. «Maika, te acostumbraste a dormir como bebé debido a Vilen», reñí en mi atolondrada mente. Hasta tienes puesta su camisa blanca. Ni siquiera eso funciona, no puedo pegar un ojo. La rabia se apodera de mi cuerpo y me incorporé de un salto. Hasta que el idiota no llegue y lo vea con mis propios ojos no podré estar tranquila. «Te mientes, deseas que ese hombre oscuro te haga olvidar tus pesadillas a base de gritos». Mis pies fríos me llevan hacia la ventana y no han llegado. Era solo dejar a la banda por qué se demoran. Las palabras de Joa retumban en mi cabeza y joden mi estado de por sí patético. *** Ak